Las autoridades de Afganistán temen que cientos de personas hayan muerto como consecuencia de los siete sismos registrados de hasta 6.3 de magnitud el distrito de Zinda Jan, en la provincia afgana de Herat, en el oeste del país, mientras que más de 300 personas se encuentran heridas.
“No hay pueblo que no tenga cientos de muertos y el número de víctimas puede aumentar aún más”, informó el director de prensa del Ministerio de Gestión de Desastres, Mula Janan Sayeq, si bien las operaciones de búsqueda continúan.
La estimación de las autoridades se basa en el número de personas que vivían en las aldeas afectadas, habitadas por aproximadamente unas mil personas, convertidas en escombros.
“La gente está debajo de las casas derrumbadas y tal vez sea esa cantidad de gente (fallecida), diferentes equipos de rescate trabajando allí”, aseveró.
Aunque no hay un recuento oficial de víctimas por los sismos registrados en la jornada, la ONG Médicos Sin Fronteras dijo estar apoyando la atención médica del hospital regional de Herat, “donde han llegado más de 300 heridos“, según informó en la red social X, antes Twitter.