Las Fuerzas Armadas de Rusia lanzarán ataques aéreos y destruirán los tanques Abrams recibidos por Ucrania de Estados Unidos, advirtió el exasesor jefe del Pentágono y coronel retirado del Ejército estadounidense, Douglas Macgregor. En sus palabras, esto «es una situación extremadamente peligrosa».
«La mayor parte de ellos [tanques] pueden ser eliminados mediante ataques aéreos. Serán destruidos en cuanto estén al alcance de los sistemas de ataque rusos», declaró Douglas Macgregor.
El exasesor consideró que el suministro de los Abrams no cambiaría el equilibrio de fuerzas del conflicto en Ucrania. Agregó que los vehículos blindados estadounidenses ya no tienen las ventajas que tenían sobre un oponente débil, incluso en una de las grandes batallas de tanques en Irak en 1991.
Macgregor también señaló que el tanque Abrams utiliza una turbina como motor que absorbe mucho combustible y deja una estela de calor, lo que facilita su detección por los sistemas de vigilancia. Incluso algunos tipos de satélites espaciales pueden observarlo.
En sus palabras, los carros de combate Abrams pueden realizar operaciones de combate sin repostar durante ocho horas, y en un ataque sorpresa del adversario, podría quedarse sin combustible.
«Esta es una situación extremadamente peligrosa«, resumió Macgregor.
Anteriormente, el coordinador del Consejo de Seguridad Nacional para Comunicaciones Estratégicas de la Casa Blanca, John Kirby, confirmó que el primer grupo de tanques Abrams ya llegó a Ucrania para fortalecer su escalada bélica tras el fracaso de la contraofensiva.
Los tanques Abrams son armas potentes, pero también van a arder, comentó el portavoz de Kremlin, Dmitri Peskov.
«Nada de esto cambiará el resultado de la operación militar especial. No existe una panacea ni un arma única que pueda romper el equilibrio de fuerzas en el campo de batalla (…) Los carros de combate Abrams son armas potentes. Pero recuerden que el presidente dijo de otros tanques producidos por otro país que arden. Y estos también van a arder», aseveró el vocero.
Previamente, se conoció que las fuerzas rusas destruyeron por primera vez un tanque británico Challenger 2. Poco después, se supo que las unidades rusas lograron destruir otro carro de combate británico de este tipo en la región de Zaporozhie. Hasta ahora, nadie nunca había logrado destruir este vehículo de combate que está en servicio desde 1994. Sputnik
