La deuda subnacional en México aumentó 89 por ciento en los últimos 15 años, principalmente a causa de la crisis financiera que golpeó al país entre 2008 y 2012, reportó el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
De acuerdo con el reporte Hablemos de Deuda 2023, las obligaciones de pago o pasivos asumidas por gobiernos o entidades estatales y municipales se vieron afectadas por la disminución del crecimiento económico y de los ingresos federales, lo que disminuyó las participaciones, que son la principal fuente de ingresos para gobiernos subnacionales.
“Además de la necesidad de financiamiento para cubrir esos déficits, se diversificaron las fuentes de financiamiento, incluyendo préstamos bancarios y financiamiento bursátil”, indica el reporte del Imco.
No obstante, señala que entre 2012 y 2022, el crecimiento de la deuda pública subnacional se mantuvo estable, con un aumento de 0.3 por ciento para ubicarse en un saldo de 684 mil 396 millones de pesos al cierre del año pasado.
De acuerdo con el Imco, la cifra representa una reducción de 4.8 por ciento en términos reales respecto a 2021.
“Solo San Luis Potosí, Baja California Sur, Yucatán, Nuevo León y Estado de México incrementaron su deuda, mientras que 26 entidades federativas la redujeron”, destacó el reporte.
Añadió que en cuanto a la deuda per cápita, Nuevo León fue la entidad con el monto más alto por 17 mil 223.3 pesos por habitante, al cierre de 2022; seguido de Chihuahua con 13 mil 203.2 pesos; Quintana Roo con 13 mil 185.1pesos; Coahuila con 12 mil 50.3 pesos, y la Ciudad de México con 10 mil 998.3 pesos.
El organismo destacó que, de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la deuda subnacional de México es la segunda más baja entre las economías más avanzadas, representando apenas 2.5 por ciento del PIB nacional.
Del total de la deuda subnacional, la mayor parte corresponde a los compromisos financieros de los gobiernos estatales, con 87.8 por ciento del total, seguida de la deuda de entes públicos estatales y los municipios, con 6.3 y 5.5 por ciento, respectivamente.