El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció este miércoles una profunda remodelación de su gabinete, con el objetivo de reforzar su equipo económico de cara a las elecciones legislativas de 2025.
Debilitado en las encuestas, el líder liberal ha cambiado más de dos tercios de su círculo íntimo: siete nuevos miembros se han unido al gabinete y una veintena de ministros ha recibido nuevas funciones.
El remezón se produce en momentos en que Trudeau quiere hacer de la economía una prioridad para contrarrestar la inflación y atajar la crisis inmobiliaria que afecta a todo el país.
«Nos enfrentamos a grandes retos. Así que reunir a los actores más fuertes y crear el equipo económico más sólido en cada sector en beneficio de los canadienses es lo más importante», explicó el primer ministro, que lleva casi ocho años en el poder.
Trudeau combinó las carteras de Vivienda e Infraestructuras bajo la tutela de Sean Fraser, ahora exministro de Inmigración.
Otro cambio importante fue el de la ministra Anita Anand, primera mujer al frente de Defensa Nacional y quien pasa a presidir el Consejo del Tesoro. La sustituye en Defensa Bill Blair, antiguo jefe de policía y extitular de Seguridad Pública.
Grandes carteras como Finanzas, Asuntos Exteriores y Medioambiente permanecen sin cambios y siguen gestionadas por Chrystia Freeland, Mélanie Joly y Steven Guilbeault, respectivamente.
Las recientes polémicas en torno Marco Mendicino, hasta ahora ministro de Seguridad Pública, le han costado su puesto en el gabinete.
Los partidos de la oposición han criticado la remodelación del consejo de ministros, al acusar a Trudeau de falta de acción ante el aumento del costo de vida.
«Su historial es un fracaso y está reestructurando casi todo su gabinete en un intento desesperado de desviar la atención de todo lo que ha roto», dijo el líder conservador Pierre Poilièvre en un comunicado.
Para el Nuevo Partido Democrático canadiense, con el que los liberales mantienen una alianza de gobierno hasta 2025, la reestructuración «no cambiará nada» en lo que respecta a la crisis inmobiliaria.
El gobierno también anunció la creación de un Consejo de Seguridad Nacional para «tratar las cuestiones urgentes relativas a la seguridad de Canadá, tanto a nivel nacional como internacional», siguiendo el ejemplo de varias naciones aliadas.
