Desde tierras chiapanecas, el aspirante a la Coordinación de la Defensa de los Comités de la Cuarta Transformación, Ricardo Monreal, expresó su solidaridad y lamentó el secuestro, por un grupo armado, de 14 empleados de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de Chiapas.
“Lamento mucho el secuestro de 14 empleados de la Secretaría de Seguridad, mi solidaridad con sus amigos y familiares y hago votos para que sean rescatados pronto, sanos y salvos”, manifestó.
Dijo que ante las condiciones que se establecieron para su liberación, el Estado no puede sino aplicar la ley, pues no debe haber impunidad, por eso “al gobernador le sugiero nunca negociar con los delincuentes”.
“Nuestro papel es el de aplicar la ley para todo aquel que la viole y hay que aplicarla para que los pueblos vivan en paz, con integridad y en tranquilidad social, aseveró.
Manifestó que el pueblo de Chiapas merece tranquilidad, pues “somos más los buenos que los malos, no nos pueden afectar, ni nos pueden generar un miedo o temor de seguir viviendo en la comunidad”.
Consideró que se debe hacer uso de labores de inteligencia, llevar a cabo una coordinación interinstitucional entre los cuerpos de seguridad, “pero es un asunto de las autoridades”.
“Vi el vídeo de uno de los trabajadores y me alegro que estén vivos y sanos”, apuntó.
Expresó que los chiapanecos son un pueblo pacífico y trabajador, con rebeldía y dignidad natural, por lo cual es fundamental que a este evento criminal se le ponga la mayor atención, no sólo por el Estado, sino por la federación.
Ricardo Monreal refirió que si algún Presidente ha puesto toda su atención, corazón y cariño para que le vaya bien a Chiapas, es Andrés Manuel López Obrador; “pero la federación como un todo, debe redoblar, subrayar y reforzar al estado en este momento”.
Indicó que la entrada de miles de migrantes de Sudamérica, el Caribe y de otras partes del mundo, es lo que ha atraído la atención de la delincuencia organizada, por las grandes cantidades de dinero ilícito que obtienen del fenómeno migratorio.
Dicho fenómeno, señaló, no lo puede contener un municipio o el gobierno estatal, es más el gobierno nacional batalla para ello, por lo que es necesaria la cooperación internacional para atenderlo.
Refirió que hay integrantes de grupos criminales que cobran entre cinco y nueve mil dólares por migrante indocumentado, para llevarlos a Estados Unidos. “Es muy delicado lo que pasa, por eso es que el Presidente pone atención como nadie a este fenómeno”.
Aseguró que se requiere de un programa integral en materia migratoria, para todas aquellas personas que cruzan el territorio nacional.
De su parte, afirmó que continuará con el proceso de transformación que el Presidente de la República inició en 2018.
Tengo un gran compromiso con la seguridad pública, el campo mexicano, la educación y la salud, “hay mucho que hace en esta región y mi compromiso es nunca dejarlos solos”.