La ola de calor que afecta a todo el país pone en riesgo la producción y distribución de alimentos perecederos debido a que las altas temperaturas estresan a los animales, los productos se echan a perder más rápido y los constantes apagones en algunos estados del país impiden que los distribuidores los puedan almacenar adecuadamente.
Entre los productos más afectados, de acuerdo con reporteros de Organización Editorial Mexicana que consultaron a productores y distribuidores, están el pollo, el huevo, la leche y sus derivados, así como algunas frutas y verduras que requieren refrigeración luego de ser cosechadas.
En San Luis Potosí, productores avícolas enfrentan una caída del 25 por ciento en la producción de huevo debido al estrés que padecen las gallinas por el calor y que hasta un cuarto de sus aves han muerto.
Productores avícolas, enfrentan crisis en producción por las altas temperaturas que se han presentado, pues mencionan que hay un 25 por ciento de mortalidad en aves de corral.
«Es algo a lo que se le llama estrés calórico, y son las gallinas ponedoras las que más sufren con esta alza de temperatura. Para que un producto tenga la calidad requerida para ser vendido, debe de cumplir con ciertas características y una de ellas es la temperatura en la que fue producido, que interviene en la textura de la yema y la clara. Por ello es necesario realizar trabajos que alivian el estrés del calor que tienen las gallinas ponedoras», dijo Carlos Gerardo Martínez Gómez, productor de huevo asentado en el municipio de San Luis Potosí.