La República Srpska (entidad perteneciente a Bosnia y Herzegovina) está lista a pagar el gas ruso en rublos, declaró Dusko Perovic, jefe de la oficina de representación en Rusia, en una entrevista con Sputnik.
«Gazprom renueva el contrato principal cada año, por lo que obtenemos un precio, en realidad un precio de mercado, pero según la antigua fórmula. Estamos dispuestos a pagar en rublos. Es una cuestión técnica. Por supuesto, hoy tenemos dificultades con el pago porque las transferencias a través de los bancos corresponsales se retrasan», apuntó.
En sus palabras, el Consejo de Ministros de Bosnia y Herzegovina acordó iniciar negociaciones sobre la construcción de un gasoducto para suministrar gas ruso. Está previsto que se conecte al sistema de transporte de gas serbio. El proyecto se encuentra ahora en fase de preparación.
La compañía de gas GAS-RES, propiedad del Gobierno de la República Srpska, había renovado su contrato con Gazprom el 1 de junio del año pasado. El precio se fijó en unos 290 dólares por 1.000 metros cúbicos y estaba previsto que se corrigiera cada trimestre. De acuerdo con Petar Dzokic, ministro de Energía y Minas de la República Srpska, Banja Luka estaba plenamente satisfecha con el acuerdo.
El consumo medio anual de gas en la república, según el Ministerio de Energía, es de unos 50 millones de metros cúbicos al año.
Bosnia y Herzegovina está conectada al sistema de tránsito de gasoductos de Serbia. El líder serbobosnio Milorad Dodik, en una reunión con el presidente ruso, Vladímir Putin, en septiembre de 2022, mencionó la cuestión energética como una de las principales.
Los países europeos viven una crisis energética debido a las restricciones contra los combustibles rusos por la operación militar especial en Ucrania lanzada el pasado febrero, cuyo objetivo principal es la desnazificación y desmilitarización de Ucrania. Putin, afirmó que las sanciones asestaron un serio golpe a toda la economía mundial y también señaló que Occidente tiene por objetivo empeorar la vida de millones de personas.
El mandatario ruso destacó que se desató contra Moscú una agresión de sanciones sin precedentes orientada a aplastar a corto plazo la economía rusa, «a derrumbar la moneda nacional, el rublo, a través del robo de nuestras reservas de divisas y a provocar una inflación destructiva». Sin embargo, destacó, el plan de Occidente no tuvo éxito.