El Ministerio de Exteriores de Rusia rechazó la desinformación del portal alemán de noticias t-online sobre la supuesta presencia de un buque militar ruso días antes del sabotaje a los gasoductos Nord Stream ocurrido en septiembre de 2022.
«Esas invenciones no buscan que salga la verdad, su objetivo es confundir. Es un ejemplo clásico de desinformación», dijo la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, en una comparecencia ante la prensa.
A finales de abril, el portal alemán t-online afirmó que cuatro días antes del sabotaje un buque militar ruso supuestamente se encontraba en la zona mencionada y especuló que la embarcación pudo llevar un minisubmarino para operaciones en el fondo marino. El sitio web alemán aducía unas supuestas fotos de la Armada danesa no publicadas.
Zajárova subrayó que cualquier periodista normal pediría mostrar esas fotos.
«La inteligencia danesa tiene una respuesta a esa petición –las Fuerzas Armadas de Dinamarca no se proponen hacer públicas esas fotos. ¿Y saben por qué? Esto es ridículo– porque son sensibles», consignó.
La diplomática insistió en que ese tipo de publicaciones de los medios es «desinformación clásica» que no se corresponde con la realidad y su objetivo es «desviar la atención».
El 26 de septiembre de 2022, tres de los cuatro ramales de los gasoductos rusos Nord Stream 1y 2 fueron blanco de sabotaje con cargas explosivas en el fondo del mar Báltico cerca de una isla danesa y frente a las costas suecas.
Una investigación periodística realizada por el prominente comunicador estadounidense Seymour Hersh, ganador del premio Pulitzer, reveló que buzos militares de EEUU colocaron las cargas explosivas bajo los gasoductos rusos en junio de 2022, durante los ejercicios Baltops de la OTAN.
Citando fuentes con conocimiento directo de la planificación operativa de los ataques, Hersh acusó a los militares noruegos de activar los explosivos tres meses después causando serios daños a los ductos que conectan a Rusia con Alemania por el fondo del mar Báltico.
Hersh subrayó que el presidente estadounidense, Joe Biden, aprobó el sabotaje tras más de nueve meses de debates secretos con su equipo de seguridad nacional.
Los preparativos para el sabotaje fueron coordinados por el asesor de Seguridad Nacional de EEUU, Jake Sullivan, quien convocó a un equipo interinstitucional para fraguar el plan, agregó el periodista de investigación.
Según el comunicador, el sabotaje estadounidense a los gasoductos rusos es un tema tabú para los medios de comunicación dominantes de su país.
Alemania, Dinamarca y Suecia se han negado a efectuar una investigación conjunta con Rusia de los sabotajes a los gasoductos. Sputnik