El presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que no vislumbra ninguna crisis económica generada por factores internos en el resto de su sexenio porque hay manejo responsable de las finanzas. Estimó que en su caso, por causas externas podría haber una crisis en 2025, una vez que pasen las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
Al hacer un balance de la situación económica, durante su conferencia, el mandatario dijo que el ritmo de crecimiento durante el primer trimestre es de 3.9 por ciento, lo cual superó las proyecciones pues entre los expertos hay una visión precavida o cautelosa del ritmo de crecimiento en el país. Mencionó que la generación de empleos se ha mantenido de manera importante y el peso se mantiene como la moneda más fuerte con relación al dólar.
López Obrador destacó que no hay ningún factor interno que pudiera augurar desequilibrios económicos y financieros en la última etapa de su sexenio. Sin embargo destacó que en su administración el crecimiento económico ha tenido una característica central: «economía, algo que es fundamental que no se daba, hay crecimiento con distribución del ingreso y la riqueza, crecimiento con Bienestar. Crecer por crecer no representa mucho, desde luego es mejor crecer que no crecer. Pero es ideal que se acompañe de una mejor distribución de la riqueza.»
Recordó que en el pasado hacia finales del sexenio se generaron crisis económicas importantes como en la transición de Carlos Salinas Ernesto Zedillo por malos manejos en la administración en esa transición.
Sin embargo, el mandatario aseveró que no se descarta que «pueda haber una crisis económica externa que pueda impactarnos. En nuestras proyecciones esa crisis económica financiera podría darse en 2025. No lo deseamos, externa. ¿Por qué? Porque tenemos una economía fuerte, finanzas públicas sanas.
«Tenemos buen manejo de las finanzas, no hay derroche ni despilfarro. Sería hasta el 2025, por razones externas porque están de por medio las elecciones en Estados Unidos y es muy difícil que se dé una crisis financiera económica antes de las elecciones. Pasando, ya es otro asunto».
Señaló que no se pretende endeudar al país porque se cuentan con los recursos necesarios para el financiamiento de las obras que están en curso y para sostener los programas sociales. Dijo que hipotéticamente si su gobierno hubiera endeudado al mismo ritmo que lo hicieron los gobiernos de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto serían tres puntos del Producto Interno Bruto, es decir una deuda de 900 mil millones de pesos, pero no se acudirá a esa vía.
«Esperamos que siga habiendo crecimiento. Que se sigan generando empleos. Se está fortaleciendo mucho el mercado interno. Nuestros adversarios dicen que estamos destruyendo al país», pero esto demuestra que no es así.
Por otro lado, el gobierno federal iniciará una etapa en la operación de la Financiera para el Bienestar (antes Telecom) y lanzará las tarjetas Financiera para el Bienestar, que sería una forma más ágil para trasladar remesas desde el extranjero a sus familiares en México, con un costo de 3.99 dólares, esto es, poco menos de 80 pesos. Con esta tarjeta se podrán trasladar hasta 2 mil 500 dólares al mes.
Al dar a conocer esta información, la directora general de Financiera para el Bienestar, Rocío Mejía dijo que según estudios de Naciones Unidas sobre el costo promedio de envío de remesas en el mundo, oscila en los 14 dólares, lo que reducirá mucho las comisiones que pagan los paisanos. Con el apoyo de los consulados y la Cancillería se está promoviendo entre la comunidad Mexicana en Estados Unidos, que puedan bajar de un tener la aplicación de la tarjeta de la Financiera del Bienestar y así poder realizar estos traslados de remesas.