Yo Campesino
• Carta a China y discusión con legislador estadounidense sobre fentanilo, claro distractor de crisis
Miguel A. Rocha Valencia
De plano se vio ridículo el ganso con su cartita solicitando al gobierno de China, encabezado por Xi Jinping ponga estricto control sobre sus exportaciones de fentanilo o sus precursores. Como respuesta recibió un mensaje similar al que le andan de Estados Unidos cuando reclama sobre la venta indiscriminada de armas “hasta en los tianguis” de aquél país.
Como si el profeta de la 4T no estuviera enterado o por lo menos quien le aconsejó enviar la cartita a Santa Claus que los embarques chinos de opiáceos y precursores de metanfetaminas o fentanilo no fueran parte de la economía asiática, hace aparecer la disputa en que se triangula con nuestro vecinos del norte como una estrategia “comunicacional” para desviar la atención de los problemas que se agudizan en México.
China niega su injerencia y en todo caso pide que Estados Unidos revise sus estrategias en las importaciones ilegales que probadamente vienen de Asia. Eso es asunto de ellos, porque la realidad muestra que la ruta del fentanilo y sus precursores lo mismo que las metanfetaminas, vienen de allá así como una gran cantidad de opiáceos en “bruto” o procesados.
Se trata de un negocio multimillonario que sólo podría compararse con el tráfico ilegal de armas de Estados Unidos hacia México, muchas de ellas a cambio de las drogas que les mandan los cárteles de este lado de la frontera, donde, también está probado, en su mayoría salen de Sinaloa especialmente el fentanilo y para ello se utiliza la franja libre que significa la costa del Pacífico “controlado” por gobernadores morenistas así como “las fuerzas militares”.
Por ello el mesías tropical cae en el ridículo al mostrar con su “cartita” y reclamos a Estados Unidos que nuestras aduanas son porosas gracias a la corrupción que en ellas impera. Lo curioso es que se le entregaron a los militares de verde y blanco con el fin de “fortalecerlas”. Los datos indican que hoy el contrabando está más fuerte que antes y se demuestra con una inexplicable caída de los ingresos fiscales mientras el volumen de mercancías es mayor.
Pero más allá de los dimes y diretes en cuanto al fentanilo que lo mismo ingresa por México que por Alaska, Canadá y la costa oeste de Estados Unidos, está en el uso de esta discusión incluso con el supuesto “agarrón” con un senador republicano, para establecer una estrategia de comunicación de buen nivel que distraiga de problemas serio que hay en México.
Y no es sólo esa vía. En comentario aparte hablaremos de la que se desarrolla para distraer del tema migratorio que cada vez se torna más complicado y no sólo por los 40 muertos de Juárez sino porque ya se convirtió en un problema de seguridad, económico, salud y social que no atinen a resolver y se agudiza todos los días.
Incluso es harto sospechoso que legisladores republicanos afines a Donald Trump amigo del caudillo de Tepetitán, se presten al juego y eso sirva “anillo al dedo” para que el profeta cuatrotero muestre su “firmeza” ante la intervención de Estados Unidos en asuntos mexicanos. Las verdad no sólo le sirve para desviar la atención sino también parta enviar fuertes críticas al gobierno de aquél país pues hace ver a Joe Biden como inepto en materia de seguridad e incapaz de aplicar políticas que detengan el ingreso de drogas a su país, donde tan sólo el fentanilo ya cobró más de 100 mil vidas.
Dice que respeta y se lleva bien con Biden, pero sus mensajes supuestamente dirigidos al senador Lindsey Graham llevan jiribilla para todo el gobierno de Estados Unidos. Una buena estrategia sin duda donde Marcelo Ebrard le entra al baile para hacerla más gorda. Por eso no le importa al machuchón tabasqueño verse inocentón ya que en el fondo, lleva su juego.