*Alrededor de los dos Bloques en Contienda, Están los Partidos Bisagra: PV y PT
*La Canasta en que se Encuentra Movimiento Ciudadano es Diferente
*Es una Respetable Organización que Tiene Vida Propia y Decidió ir Sola
*¿Las Contiendas? Polarizadas Entre Morena y la Alianza PRI, PAN y PRD
ALEJANDRO ZAPATA PEROGORDO
Las elecciones del Estado de México y Coahuila se aprecian en la antesala de la presidencial para el 2024 y, como están las cosas, resultan muy significativas, sobre todo la mexiquense considerando que es la joya de la corona, pues se trata de la entidad con mayor número de electores y además tiene un potencial relevante tanto en lo económico como por su trascendencia e influencia política.
El ambiente ríspido y el clima de confrontación hacen de las contiendas todo un ejercicio salpicado con descalificaciones, todo gira alrededor de un eje central, pues más allá de un proceso estatal se pone en la balanza la aprobación o el rechazo al actual régimen de la cuatrote, lo que no es cosa menor.
Desde hace tiempo se han visualizado dos bloques: los opositores y los oficiales. Alrededor de estos se encuentran algunos partidos que procuran colocarse en el papel de bisagra y obtener rendimientos mayores a su talla, como el caso del Verde y el Partido del Trabajo, que se han mantenido de la ubre gubernamental, sacando raja de las coyunturas.
Sin embargo, no podemos decir lo mismo con relación a Movimiento Ciudadano, la canasta en que se encuentra es diferente, ha decidido ir solo en varias contiendas electorales y, aunque no en todas ha sido exitoso, sus triunfos en zonas específicas como Jalisco y Nuevo León, hacen de esa fuerza política una respetable organización al advertir que tiene vida propia.
No obstante, los estudios demoscópicos tanto en Coahuila como en el Edomex colocan al Partido Movimiento Ciudadano, sin posibilidades de éxito, ya que las contiendas se han polarizado entre Morena y la alianza conformada por el PRI, PAN y PRD.
Así, el escenario previsible en esas contiendas polarizadas entre dos fuerzas resulta para Movimiento Ciudadano una derrota anunciada, con muchas aristas y ninguna favorable, por el contrario, al permanecer en medio de ambos bandos, con porcentajes de intención del voto para inclinar de uno u otro lado las cifras del triunfo, los reproches y las culpas son de esperarse.
En esa lógica resulta comprensible la decisión de no registrar candidatos a gobernador en esas entidades, evitando con ello lo que consideran un innecesario desgaste, sin embargo, tampoco ha tomado postura alguna, lo que indica que sigue aun sin participar formalmente, en medio de las contiendas, pasa de ser jugador a calificador.
Es un paso interesante, no quiere sufrir descalabros y llegar a la campaña presidencial con estridentes derrotas en esos estados, pues de ser así, iniciaría con el pie izquierdo, continúa cuidando una posición exclusivamente partidista.
Al quedar en medio sin pronunciarse, amén de curarse en salud, también refrenda su decisión de competir en solitario por la presidencial, aunque cabe añadir, que al retirarse de las contiendas electorales incluye además un signo de debilidad al prever anticipadamente un fracaso.
Ante esa realidad, más que curarse en salud, Movimiento Ciudadano está obligado a sopesar más allá de sus legítimos intereses partidistas, como va a colaborar con la reconstrucción nacional y el desbarajuste que nos dejan.
