ALBERTO F. MENA MALLEN
Pensará el Peje armar borlote en las elecciones del 2024 argumentando que hubo un fraude, en caso de que Morena pierda.
¿Creen que lo hará?
Ya comenzó el rumor de que se comportaría de esta manera.
Y todo por el actuar del tabasqueño, donde muchos ciudadanos no encuentran la razón por lo cual AMLO trata de descarrilar o destazar al Instituto Nacional Electoral, para lo cual ha argumentado que gastan mucho, que tienen unos sueldos superiores al del primer mandatario y que la estructura del organismo es demasiado grande, además de que es manejado u operado por intereses ajenos al país, aparte de que han cometido muchos fraudes, por lo que el INE debe ser operado por el pueblo. No le interesan los argumentos que emiten los especialistas. Él va a lo suyo: destruir a las instituciones.
Lorenzo Córdova, a quien el presidente llamó “farsante”, consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE) dijo en una de sus intervenciones ante medios de comunicación, que la reforma electoral impulsada por el presidente López Obrador, llamado también Plan B, podría amenazar el voto libre y provocar una situación de violencia. Este argumento no ha tenido respuesta por parte de los morenos.
Subrayó que el actual sistema electoral de México es considerado uno de los mejores de todo el mundo por organizaciones ciudadanas, organismos internacionales e instituciones de defensa de la democracia; Ciro Murayama, también consejero del INE, coincidió con su presidente cuando destacó que estos ingredientes envenenados, buscan la anulación de las elecciones de 2024, así como derivar en conflictos pre y postelectorales que incluso, podrían manifestarse en violencia.
Los mexicanos no queremos este ambiente y menos que se atente contra ciudadanos que solo deseamos democracia con libertad y no andar pasando las de Caín por las decisiones que el presidente ha tomado a la ligera, o tal vez, las ha decidido desde que fue candidato y que no informó a los mexicanos lo que iba a hacer con México, pensando que encerrarlo en una burbuja es lo mejor para todos, cuando el mundo se interrelaciona cada vez más. Es decir, mintió como lo ha hecho hasta ahora.
“Si las reformas eran para evitar el conflicto, esta reforma antidemocrática propicia el conflicto”, advirtió Murayama, quien considera el plan B “una decisión de una mayoría que le importó un bledo la opinión de la oposición y que se impuso; una mayoría podríamos decir, tiránica”.
Y agregó: Si finalmente se aplica el plan B, “podríamos tener una regresión” antidemocrática “que es absolutamente indeseable” y “podría instalarse en el país aquello que la democracia supone como negación, que es la violencia”, dijo Córdova durante la presentación del libro “La Democracia no se Toca”.
Ni el presidente ni sus “obedecedores”, han rebatido estos argumentos o afirmaciones que se emiten por especialistas en el tema y aunque han informado que el INE no se eliminará, no han dicho que se limitará un servicio profesional de carrera que se ha construido durante muchos años y que ello ocasionará beneficios solo para ellos o su partido y no para todo México.
Quieren hacerlo a su modo, aunque salga mal o pésimo, eso no importa, pero se le da gusto al presidente, quien tiene que estar feliz para que sus arrebatos de ira y de odio no los alcance y termine por tomar decisiones que afecten a sus subordinados, como separarlos del cargo o usar herramientas legales o penales contra ellos.
Por ello, es importante que la ciudadanía tome cartas en el asunto y se manifiesten en contra de estas decisiones que solo los afectarán de una u otra forma, y quizá pierdan o perdamos lo que se ha avanzado en un bienestar que sólo se ve en las telenovelas ya que, en la vida real, el único beneficio que se tiene son los apoyos que brinda “el peje” para tener sumisos a los cautivos mexicanos.
Hace unos días tocaron a mi puerta servidores de la nación quienes preguntaron si era afín a Morena, (vivo en el Estado de México), y la respuesta fue que no lo era, ni de ellos ni de ningún partido. Al tratar de informarme un poco más sobre sus actividades y el por qué andaban preguntando casa por casa, me dijeron que quieren ver el ambiente que existe en esta colonia, solo eso. Únicamente me señalaron, al decirle que todos los partidos políticos eran pésimos, incluyendo los morados, me dijeron que no era así, porque en Morena se reparte la riqueza, cuando en el PRI y PAN solo lo hacían en las cúpulas.
Y que puede uno responderles a estos servidores de la nación que realizan actividades electorales que no les corresponde, cuando sus realidades son éstas, las que ha construido el presidente para sus afines a la 4T, pero que no están informados de lo que se hace mal, cuando lo único que les interesa son los apoyos que se otorgan.
Preocupa que ya inicien estos rumores de que el presidente, aunque ha afirmado que no se reelegirá, buscará de alguna u otra forma que su proyecto de nación continúe y si es declarando el fraude en las próximas elecciones, no dudará en hacerlo, ya que su necedad, así lo pinta, sin importarle cuánto daño pueda ocasionar, con tal de salirse con la suya.
Los argumentos reiterativos de todos los miembros de la 4T, incluido al presidente, es de que el INE es caro, costosísimo, de que es el aparato organizador de elecciones más caro del mundo, además de que no ha ayudado a fortalecer la democracia. El INE cuesta al año, aproximadamente 14 mil millones de pesos; el AIFA, el aeropuerto Felipe Ángeles, cuesta siete veces más que el INE; las pérdidas de Pemex cuestan quince veces más que el INE; el Tren Maya, proyecto ecocida del presidente, cuesta quince veces más que el INE; y la refinería Dos Bocas, capricho presidencial, cuesta 25 veces más que el INE.
Pero habría que preguntarnos, ¿cuánto vale el INE, tener elecciones limpias en México, nuestras libertades, el contar con una credencial de elector, nuestra democracia? Eso es lo que todos debemos salir a defender este 26 de febrero, en la marcha ciudadana.
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