La Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados aprobó en lo general y particular, el dictamen del Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio fiscal 2023, que prevé un gasto neto total por 8 billones 299 mil 647 millones 800 mil pesos con un déficit presupuestario de un billón 134 mil 140 millones 700 mil pesos, el mayor en la última década.
Con 31 votos a favor de Morena y aliados, así como 24 en contra de la oposición y ninguna abstención, fue avalado en una sede alterna, al estar bloqueadas todas las entradas del Palacio Legislativo de San Lázaro. En la sesión convocada para esta mañana, el dictamen será subido al Pleno para discutir las reservas y, en su caso la votación con la que será aprobado el paquete. Morena y sus aliados cuentan con los números que le permite sacar adelante la respectiva ley de egresos.
El presupuesto considera reasignaciones por 6 mil 437.5 millones para la Secretaría del Bienestar, de los cuales 3 mil 841 millones serán destinados al programa de Pensión para Adultos Mayores y 2 mil 500 millones a la Pensión para Personas con Discapacidad Permanente.
Como se había filtrado, los recortes más notorios son para el Instituto Nacional Electoral (INE) con 4 mil 475.5 millones de pesos menos en su presupuesto para operar el próximo año.
También se prevé una reducción al Poder Judicial de mil 425 millones a su presupuesto, así como reducir recursos al Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), a la Auditoría Superior de la Federación y otros entes descentralizados.
El panista Héctor Saúl Téllez criticó el gasto en obras como el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el aeropuerto de Santa Lucía.
“Solamente el Tren Maya costará 147 mil millones de pesos en este presupuesto y nuevamente se le vuelven a dar no pocos recursos, sino 43 mil millones de pesos, a la refinería de Dos Bocas cuando supuestamente ya están inaugurada. El aeropuerto Felipe Ángeles se va a llevar 900 millones de pesos para su operación, porque este aeropuerto no ha podido despegar y es necesario inyectarle recursos para que pueda seguir funcionando, pero en números rojos”.
Por su parte, el diputado morenista, Carol Antonio Altamirano, defendió el proyecto presupuestal y las reasignaciones a programas sociales, así como la inversión en los megaproyectos presidenciales: ¿Y por qué tenemos que seguir invirtiendo en el Tren Maya, en el Corredor Interoceánico?, pues porque si queremos mantener los empleos y si queremos crear empleos, tenemos que invertir en las obras que se están ya desarrollando”.
En su intervención, el diputado Sergio Barrera Sepúlveda, de Movimiento Ciudadano, consideró que el presupuesto “responde a los caprichos de una sola persona y hace oídos sordos a las necesidades de las y los mexicanos”, al tiempo que dijo que se trata de “la peor versión del centralismo mexicano”.
Foto: Cámara de Diputados