Los ejércitos de Corea del Sur y Estados Unidos, dispararon cuatro misiles en un ensayo conjunto, que pretende servir de respuesta al lanzamiento de un misil balístico de rango intermedio por parte norcoreana.
Cada uno de los aliados disparó dos misiles del sistema ATACMS hacia el mar de Japón que golpearon los objetivos designados, según detalló el Estado Mayor Conjunto surcoreano en un breve comunicado en el que no se especifican más detalles sobre la hora o lugar del ensayo armamentístico.
El martes Pionyang disparó lo que parece ser un Hwasong-12 que sobrevoló Japón por primera vez en cinco años y que ha supuesto el proyectil norcoreano que más distancia ha recorrido jamás al haber volado en torno a 4.500 kilómetros alcanzando una altura máxima de casi 1.000 kilómetros.
El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, condenó el mismo martes el lanzamiento y prometió una primera respuesta que llegó horas después, cuando un caza F-15 surcoreano disparó bombas de precisión también sobre objetivos simulados en el mar Amarillo.
Muchos expertos creen que el hecho de que el proyectil norcoreano sobrevolara Japón por primera vez en un lustro puede apuntar a una intensificación, en cantidad y envergadura, de las pruebas de armas norcoreanas tal y como ya sucedió en precisamente en 2017, cuando el régimen realizó el que de momento es su último test nuclear hasta la fecha.
Corea del Norte, que ha rechazado las ofertas para retomar el diálogo y permanece completamente aislada del exterior por la pandemia, aprobó en 2021 un importante plan de modernización armamentística.
Los satélites han revelado que lleva meses preparada para llevar a cabo una nueva detonación en Punggye-ri, y los analistas creen que el lanzamiento del martes puede anticipar un nuevo ensayo atómico que, apuntan, casi con toda probabilidad se haría tras la conclusión del congreso del Partido Comunista Chino para no soliviantar a Pekín