Luego de realizar una marcha y mitin en la ciudad de Iguala, en el que estuvieron acompañados por padres de familias e integrantes de organizaciones sociales, estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa vandalizaron las instalaciones del Palacio de Justicia de Iguala.
Los estudiantes utilizaron dos vehículos repartidores de la empresa Bimbo y Pepsi, los cuales utilizaron para abrir las puertas de la sede judicial.
Ingresaron al lugar y lanzaron piedras y cohetones contra las oficinas, las cuales estaban deshabitadas porque las autoridades decretaron día libre, tomando en cuenta las manifestaciones programadas.
Posteriormente prendieron fuego a los vehículos, ante el asombro de los automovilistas y personas que por ahí transitaban.
El reducido grupo de normalistas continuó realizando pintas y destrozos en el inmueble, sin que se registrara la presencia de elementos de alguna corporación policiaca.
Debido a este ataque, la circulación vehicular fue suspendida en calles aledañas, sin la presencia de elementos policiacos.
Luego de casi media hora, los estudiantes procedieron a abordar los 31 autobuses en los que llegaron a la ciudad, para enseguida retirarse con rumbo a Chilpancingo.
Luego de que se retiraron los normalistas, arribó al lugar personal del Cuerpo de Bomberos para sofocar las llamas de los dos vehículos.
El contingente salió de Chilpancingo al mediodía, arribando cerca de las tres de la tarde a Iguala, donde se congregaron para realizar una marcha por las principales calles de la ciudad.
Posteriormente realizaron una mítin en la estela conmemorativa ubicada en el sitio donde fue encontrado Julio César Mondragón, normalista que fue asesinado y desollado.