Miguel Félix Gallardo, llamado “El Jefe de Jefes“, cumplió con los últimos trámites para su traslado hacia su casa, donde cumplirá el resto de su condena después de estar recluido en el penal de Puente Grande, en Jalisco. No se fue a su casa. Será hasta el 23 de septiembre.
El fundador del extinto Cártel de Guadalajara estuvo acompañado de su hijo y abogado, y estuvo presente en la diligencia en la que le será colocado un brazalete electrónico, como lo determinó el juez Séptimo de Distrito en Materia Penal.
De hecho, fue apenas unos días que el juez le concedió la prisión domiciliaria debido a las enfermedades que lo aquejan.
Este jueves Puente Grande fue resguardado por vehículos de asalto y blindados, tripulados por elementos de la Guardia Nacional y personal del Ejército Mexicano, en espera de la excarcelación del narcotraficante.
El lunes se informó que un juez de distrito concedió la pena en casa por cárcel, había solicitado dicho beneficio desde el 2019, sin embargo, apenas se otorgó por su avanzada edad y su deteriorado estado de salud.
Félix Gallardo ha estado encarcelado por 32 años en Puente Grande y actualmente tiene 75 años de edad.
En julio de este año, Félix Gallardo fue llevado a un hospital de Guadalajara en donde le salvaron la vista.
El excapo tiene un complicado cuadro de salud, ha perdido la vista en un ojo, audición en el oído y otros padecimientos, indicó entonces el director general de Prevención y Reinserción Social de Jalisco, Juan Antonio Pérez.
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