El subsecretario de Seguridad y Protección Ciudadana, informó esta mañana que el general José Rodríguez Pérez, excomandante del 27 Batallón de Infantería de Iguala, Guerrero, fue aprehendido por su presunta intervención en la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa.
Ricardo Mejía Berdeja, dijo que otros dos militares que participaron en el secuestro y desaparición de los jóvenes normalistas ya también fueron capturados, mientras que un implicado más, se mantiene prófugo, aunque ya existe orden de aprehensión en su contra.
“Se han dictado cuatro órdenes de aprehensión contra elementos del Ejército Mexicano, al momento se han ejecutado tres de ellas, hay tres detenidos entre ellos el Comandante del 27 Batallón de Infantería cuando se suscitaron los hechos en Iguala en septiembre del 2014”, informó.
En el más reciente informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa Ayotzinapa), seis estudiantes normalistas que estaban privados de su libertad en una bodega de Pueblo Viejo, comunidad de Iguala, el día 30 de septiembre del 2014, habrían sido entregados por el crimen organizado al entonces coronel José Rodríguez Pérez, quien habría dado la orden de ejecutarlos y desaparecer sus cuerpos para borrar cualquier evidencia de su asesinato,
“Los seis estudiantes habrían estado vivos hasta cuatro días después de los hechos y habrían sido asesinados y desaparecidos por orden del coronel, supuestamente el entonces coronel José Rodríguez Pérez”, aseguró el Subsecretario de Derechos Humanos de Gobernación, Alejandro Encinas, el pasado 26 de agosto.
En el informe de la CoVAJ, anexo 8, se revela que el 30 de septiembre de 2014, a las 21:11 horas, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) recibió una denuncia anónima sobre el secuestro de los 43 jóvenes normalistas, destacando que seis de ellos estaban vivos y privados de su libertad en una bodega de Pueblo Viejo.
La denuncia fue ocultada dentro de la Sedena hasta el 2 de octubre de ese mismo año, pero los mensajes de texto que se han revelado durante las indagatorias indican que un sicario conocido como “El Chino” alertó a sus mandos criminales de que seis normalistas seguían vivos, por lo que recibió la orden de “encargarse de ellos” más tarde.
Para “arreglar el problema”, el presunto sicario se habría coordinado con el coronel, supuestamente el coronel José Rodríguez Pérez, quien supuestamente ordenó la muerte de los sobrevivientes y la desaparición de sus cuerpos.
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