Punto de Vista
Por Jesús Michel Narváez
Cuando lo ciencia es incapaz de aclarar, la mente no capta, el sentido común desaparece, es fácil ignorar lo que se busca con el anuncio de que este, el próximo y 2024, “habrá más recursos para los programas sociales”.
No se requiere ser Einstein para descubrir la meta que persigue el huésped temporal -aunque en ocasiones parecería que se quiere quedar todo el tiempo sin pagar renta- y que no es otra que recomponer el rumbo personal y cooptar a millones de beneficiarios.
Confirmar que habrá “aumentos para los adultos mayores y su pensión universal” y que ninguno de los programas sociales se quedarán sin recursos y tampoco serán recortados, aún y cuando las finanzas públicas gritan su desesperación por la caída de los ingresos y el aumento de los egresos, tiene su razón de ser.
¿Y cuál podría ser?
Incrementar los “beneficios” para los que menos tienen, conlleva el compromiso de quienes los reciban de “votar por Morena, por sus candidatos, por sus ideales”.
Da la impresión de que el presidente de la República tiene, en efecto, “otros datos”, los reales, del comportamiento de los ciudadanos.
Resulta incomprensible que, frente a las crisis, así en plural, que se viven en el país comenzando por la de salud y educación; empleo y seguridad; condiciones de vida y reducción dramática de la clase media; zonas cooptadas por el crimen organizado y una alarmante inflación; aumento de homicidios dolosos y feminicidios, entre otros aspectos, desde algunas empresas demoscópicas se califique la popularidad presidencial “in crescendo”.
Con el cinismo caracterizado por el gobernante y su equipo, abiertamente se insiste en convencer a la gente que tiene apoyos económicos -y qué bueno que los tengan- de convertirla en, prácticamente, zombi, para seguir ciegamente al iluminado.
Afirma YSQ que los rumores de que se reducirán las pensiones y los otros apoyos, son falsos.
Seguro que sí. Porque no existen. Los inventa para arremeter contra los críticos que lo traen a toallazos por el anuncio de su decretazo. Antes del alud de exhibiciones por las flagrantes violaciones a la Constitución y las leyes que de ella emanan, no había tocado el tema.
Lo saca de la chistera para despertar el ánimo de los beneficiarios.
¡Tendrán aumentos!
Reconoce que en el gobierno federal habrá ajustes para apegarse a la “pobreza franciscana” pero, aclara, no afectará los presupuestos para programas sociales.
“El próximo presupuesto”, el del 2023, tendrá incrementos para las personas registradas en los padrones -que nadie conoce- de programas sociales.
Y, por si fuera poco, cuando se vaya -si es que se va-, es decir, en 2024, ¡habrá más aumentos!
¿Qué hay en 2023?
¡Elecciones en el Estado de México y Coahuila!
¿Y en 2024?
La presidencial, la del Congreso de la Unión y la de 6 entidades del país.
Más claro, ni el agua santificada.
Gastar para mantener el poder, esa es la línea.
No lo hará por gusto.
Lo hará para tener más votos.
Habría que recordar lo decía en pasadas elecciones: si les dan dinero, despensas o cualquier otra cosa, acéptenlos… agárrenlos… y voten por quien quieran.
Ojalá y los ciudadanos emitan el sufragio en plena libertad. Los programas sociales no desaparecerán. Será el huésped de Palacio Nacional, cuya sombra rondará entre los lujosos pasillos.
Michel y en Misión, Periodismo sin Regaños martes y jueves de 16 a 17 horas por el 760 de Amplitud Modulada