Integrantes de las ocho fracciones y asociaciones parlamentarias en el Congreso local solicitaron a la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM), Nashieli Ramírez Hernández, investigue el desalojo violento que sufrieron integrantes de la comunidad triqui el pasado 12 de junio, por parte de elementos policiacos, mientras se manifestaban en el Zócalo.
Los representantes populares hicieron un llamado a todas las autoridades del Gobierno central a conducirse con empatía y respeto, al tiempo de que se trate dignamente a una comunidad que ha sido vejada históricamente.
La fracción del PAN, que presentó el punto de acuerdo, exigió que no se repitan este tipo de hechos y se sancione a las autoridades correspondientes, en caso de haber incurrido en excesos.
La diputada Frida Jimena Guillén Ortiz destacó que esas personas se trasladaron a la capital del país para pedir apoyo de las diferentes autoridades, luego de que fueron desplazados de su comunidad; sin embargo, la respuesta no ha sido la esperada.
“En meses recientes la comunidad triqui se trasladó a la Ciudad de México para pedir apoyo desesperado ante el desplazamiento del que han sido objeto en su tierra de origen, Tierra Blanca, Copala, Oaxaca, en donde por medio de golpes, amenazas y hasta homicidios les despojaron de sus tierras”, externó.
También dijo que la pobreza ha provocado las grandes olas migratorias en México y es la capital del país el principal receptor de la comunidad indígena, toda vez que se asume que aquí pueden existir más y mejores oportunidades, o por lo menos puede proveer lo necesario para sobrevivir. Expuso que casi la mitad de los desplazados internos son indígenas y rebasan las cinco mil personas que buscan un espacio donde vivir y trabajar, preferentemente, ofreciendo su trabajo artesanal.
