Halley Jesús fue levantado en Texcaltitlán y después rescatado en medio de un tiroteo; aunque fue acusado de delincuencia organizada y trasladado a un penal, al final se comprobó su inocencia y salió de prisión, pero su vida ya no será la misma.
La pesadilla de Halley y su familia comenzó el pasado 13 de junio por la tarde cuando salió de su casa rumbo a la tienda y fue interceptado por sujetos armados en pleno centro de Texcaltitlán.
De acuerdo a su abogado, ese día al ser abordado por sujetos armados, solo sintió un golpe en la cabeza y cuando despertó, estaba amarrado de pies y manos, en un lugar alejado.
“Él relata que llegó a un lugar donde pasó la noche en un patio con lluvia. Al día siguiente se percató que era de día por el canto de los pájaros”, refirió.
Después de ello, comentó, se dio el operativo y por fortuna Halley, sobrevivió a un tiroteo, donde murieron 12 personas.
“Cuenta que ese día sólo escuchaba cómo caía gente a su lado y morían, fue casi una hora y media de balazos”, relató el abogado.
Mencionó que una vez que los cuerpos policiacos lo encontraron, lo liberaron, le dieron de comer e incluso a la hora del traslado a las instalaciones de la FGJEM, lo llevaron en otro vehículo.
Sin embargo, después la FGJEM lo traslada a un penal y le imputan delitos, hasta que un juez lo libera.
“Lo ideal hubiese sido que después de ser rescatado, lo hubieran puesto en libertad y no dejar que eso pasara a más”, recalcó el abogado defensor de Halley.
Relató que la familia de la víctima lo buscó luego de su desaparición y tras un peregrinar por lograr la ficha de búsqueda, Halley se comunicó con su hermano y le dijo: “me rescataron vengan por mí a la Fiscalía”.
Pese a los inconvenientes, indicó, al final triunfo la justicia y el derecho, aunque ahora la vida de Halley Jesús ha dado un giro de 360 grados.
“Ya no puede volver a su casa, prácticamente su vida ya cambio por completo, pues de víctima pasó a ser acusado y privado de su libertad también por la autoridad”, recalcó.
Halley Jesús fue uno de los detenidos en el operativo implementado en Texcaltitlán y de los ocho que fue trasladado a un penal, donde después un juez lo liberó.