México retomó su iniciativa para acotar el veto en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En un debate del Consejo sobre rendición de cuentas, justicia y derecho internacional, el representante permanente mexicano ante la ONU, Juan Ramón de la Fuente dijo este jueves que la propuesta que México impulsa junto con Francia ya cuenta con el apoyo de 105 países.
A nombre de México, integrante no permanente del Consejo de Seguridad, manifestó que el derecho de veto de los cinco miembros permanentes (Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y China) es un obstáculo para que este organismo cumpla su responsabilidad de mantener la paz y la seguridad internacional.
“Por ello, junto con Francia, seguiremos impulsando nuestra iniciativa conjunta para que los miembros permanentes se comprometan, de manera voluntaria, a abstenerse de recurrir al veto frente a situaciones de atrocidades masivas”, dijo el diplomático.
La coyuntura global hace patente la relevancia de la propuesta franco-mexicana, dijo De la Fuente al invitar a quienes no lo han hecho a sumarse a esta iniciativa, cuya única premisa es que jamás será admisible ni justificable la comisión de atrocidades, sin importar por quién sean cometidas, ni el objetivo que persigan.
Afirmó que “de nosotros depende la efectividad del sistema internacional para la rendición de cuentas y la impartición de justicia, que se respete el derecho internacional, y que las violaciones a la ley no queden impunes”.
De la Fuente presentó al Consejo un conjunto de propuestas para fortalecer el órden internacional con base en el estado de derecho, pues señaló que son constantes y muy frecuentes las violaciones graves al derecho internacional.
Planteó que es indispensable que todas las dependencias de la ONU, en particular el Consejo de Seguridad, actúen de conformidad con el derecho internacional y que deben evitarse aquellas interpretaciones de las normas fundamentales que no cuentan con respaldo en la jurisprudencia de la Corte Internacional de Justicia.
Propuso que se fortalezca a la Corte como principal órgano judicial de la ONU y como garante de la rendición de cuentas en casos de responsabilidad internacional de los Estados.
Afirmó que sería útil que la Asamblea General autorice permanentemente al secretario general a solicitar opiniones consultivas a la Corte y llamó al Consejo a ser más proactivo al ejercer su facultad de remitir situaciones que lo ameriten a la Corte Penal Internacional.
Adelantó que México promoverá que este año que la Asamblea General inicie un proceso para negociar y adoptar una convención para prevenir y sancionar los crímenes de lesa humanidad.