Punto de Vista
Por Jesús Michel Narváez
Primero fue España. Después Panamá. Ahora Estados Unidos.
Al presidente López le falta manejo diplomático y todo indica que el responsable de exteriores, Marcelo Ebrard no es escuchado o simplemente es ignorado.
Con España las relaciones se han tensado como nunca desde el reinicio de las mismas. Ahora están en “pausa” y todavía el “embajador” mexicano no arriba a Madrid para presentar al Rey Felipe VI sus “cartas credenciales”, las oficiales porque las otras ya se conocen no solamente en Sinaloa sino en la llamada Madre Patria.
Panamá siguió y las relaciones están más cerca del rompimiento que del fortalecimiento. La designación, primero, de Pedro Salmerón, señalado de presuntos acosos sexuales. Le siguió otra rechazada propuesta: Jesusa Rodríguez, más conocida por sus adicciones que por su trabajo teatral, porque del legislativo, mejor no hablamos.
Ahora hay un enfrentamiento, abierto, sin tapujeras, con Estados Unidos.
Lo de España es grave porque forma parte de la Unión Europea, el segundo bloque comercial más importante del mundo y el segundo inversor en México… pero enfrentar a Estados Unidos por el mensaje posteado por el secretario de Estado, Anthony Blinken, es otra cosa. Por ello la Casa Blanca respondió al presidente López, quien en la mañanera de ayer, llamó malinformado al funcionario estadounidense e incluyo consideró su “preocupación” por la seguridad de los periodistas, como injerencista, con fuerza: los hechos hablan.
México es el segundo socio comercial de la Unión Americana. Pelea el primero con Canadá y hay meses en que lo obtiene.
Estados Unidos es nuestro vecino.
Hay más de 3 mil kilómetros de porosa frontera.
Allá están 12 millones de connacionales, legales e ilegales, que aportan 5 puntos del PIB, lo que no hace Pemex, la CFE o los programas Sembrando Vida, Jóvenes Construyendo el Futuro y Pensión Universal. La mayoría de los recursos que se regalan, provienen de impuestos que, conforme a la información del SAT, cada día se recauda más.
De Estados Unidos llega la mayor inversión extranjera directa.
La industria automotriz no es nacional, es global liderada por Estados Unidos y es generadora de riqueza por el alto nivel de autos exportados.
El mayor número de turistas provienen allende el norte.
Aquí hay un millón de estadounidenses que han invertido en propiedades y buena parte de ellos es dueña de importantes porciones playeras, sobre todo, en Baja California Sur.
Hacer un paralelismo entre aquella película “Un Día sin Mexicanos”, en Estados Unidos, lo que provocaría una crisis de dimensión impresionante -quizá más impactante que la crisis económica de 2008- habría que pensar el daño para México con un solo día sin exportaciones sin importaciones.
¿Ebrard le habrá hecho notar al presidente que una pelea de box es entre iguales de peso?
Ahora comprar la bronca con EU cuando el presidente Biden está ocupado en el conflicto Ucrania-Rusia, no parece una acción diplomática sino un abuso de la situación.
¿Dónde están los consejos diplomáticos?
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