José Vilchis Guerrero
Tras lamentar la muerte de periodistas, el presidente Andrés Manuel López Obrador insistió en que su gobierno se diferencia en que no se ordena desde el poder asesinar a nadie y se respeta el derecho a la información y a disentir. No es el Estado el principal violador de derechos humanos, afirmó,
“No hay crímenes de estado; no se ordena desaparecer a nadie, no existe el bajo nivel de calidad que se presentó durante el periodo de Felipe Calderón en que eran más los muertos que los heridos y detenidos y eso lo puedo probar. No se ordena desde el poder asesinar a nadie”.
Reconoció que aunque es lamentable la muerte de periodistas, no es la misma actitud que prevalecía en el régimen anterior y va a continuar el combate a la inseguridad, el crimen y la impunidad, no se va a permitir la asociación delictuosa entre autoridades y el crimen.
El jefe del Ejecutivo que en su régimen el gremio periodístico tendrá seguridad y protección, porque no están solos, hay respeto a la libre expresión y se respeta el derecho a disentir, porque nadie ha sido censurado, ni Carlos Loretde Mola, ni Joaquín López Dóriga ni Carmen Aristegui, a los que considera sus opositores.
Durante la conferencia de prensa en las instalaciones de la Zona Militar número 2 de Tijuana, volvió a pedirles a estos personajes que voluntariamente informen de sus ingresos, porque es ilegal que sean patrocinados por fundaciones de Estados Unidos y empresas que antes no pagaban impuestos o tienen intereses creados.
“Los futbolistas famosos dan a conocer cuánto ganan, los beisbolistas lo hacen desde que son contratados, entonces ¿por qué no lo van a hacer los periodistas?”, se cuestionó.Anunció que comentará al presidente Joe Biden que hay fundaciones de Estados Unidos que los apoyan.
“Son las empresas las que imponen a los gobernantes. Son las grandes empresas las que inflan a políticos o a partidos, de modo que una persona sin capacidad, ni autoridad moral, sin amor al pueblo llega a ocupar un alto cargo porque lo promovieron e introdujeron al mercado como un producto chatarra”.