José Vilchis Guerrero
A más de tres años del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador se sigue la investigación de funcionarios ligados a panistas y priistas de administraciones anteriores y que continúan prestando sus servicios como funcionarios públicos en varias dependencias y en los estados.
¿se haría una revisión del trabajo de estos funcionarios? Le preguntó una reportera y López Obrador respondió que se está haciendo.
Se mencionaron varios nombres de funcionarios que ocupan puestos directivos en los centros de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en los estados de Sinaloa, Sonora, Nuevo León, Veracruz y Oaxaca, y sus titulares están ligados a administraciones panistas y priistas.
Como el ingeniero José Refugio, muy cercano al ex gobernador priista Juan Millán; el director del Centro Sonora, Godofredo Garner Anaya, vinculado al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el sexenio anterior y fue subsecretario de Planeación de Infraestructura en el gobierno de Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco”.
En el Centro SCT de Nuevo León está Blanca Estela Aburto, quien trabajó en el gobierno del veracruzano Javier Duarte y cuenta con un historial de obras inconclusas en la carretera Nacional de Veracruz; también el director del Centro SCT de Veracruz, Ramón Alvarez Fontán, quien antes fue director de Carreteras en la Secretaría de Obras Públicas de Veracruz con Javier Duarte.
Álvarez Fontán ahora beneficia con contratos a empresas vinculadas al ex gobernador Duarte, preso y bajo proceso penal, como las obras asignadas a Salvador Mansur. En Oaxaca es José Luis Chia Pardo, director del Centro de SCT y se le conoce muy ligado al ex presidente Felipe Calderón.
Durante la conferencia de prensa en Palacio Nacional, López Obrador justificó que son funcionarios que persisten en el servicio público y si son eficaces se mantienen en sus funciones.
“Lo que pasa es que fueron muchos años, fueron 36 años de neoliberalismo. Se busca que sean verdaderos servidores públicos, pero es tan grande el gobierno que muchos de los funcionarios se fueron acomodando en distintas áreas, pero todos saben que no se acepta la corrupción”.
El jefe del Ejecutivo prometió que “vamos a seguir limpiando la corrupción. No se aceptan ni el amiguismo ni a los recomendados.
“Lo mejor es no correr a nadie si cumple con su función. Ano ser que sea corrupto. Mencionar a personas que presuntamente actúan de forma deshonesta, ayuda mucho, pero que lo sepan los funcionarios de que no nos vamos a cansar de erradicar la corrupción y el amiguismo”, concluyó