Por Verónica V. González y Arnoldo Piñón
¿Influyó la participación de los candidatos a la dirigencia de los petroleros en la conferencia mañanera en Palacio Nacional, en el sentido del voto?
Difícil saberlo; pero se trató de un ejercicio inédito que dejó más preguntas que respuestas.
¿Por qué sólo los candidatos petroleros han tenido ese privilegio? ¿Por formar parte de una industria prioritaria en las políticas del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador?
En las próximas semanas los trabajadores sindicalizados del ISSSTE serán llamados a elegir a su siguiente dirigente para los próximos cuatro años.
Independientemente de cuántos se registren como candidatos, ¿serán invitados para que en la mañanera y a nivel nacional expongan sus propuestas?
El Sindicato Nacional de Trabajadores del ISSSTE, con una membresía cercana a los 80 mil afiliados, debe ser considerado parte de servicios estratégicos, como son los de salud, sobre todo por la pandemia de la Covid-19 que se enfrenta.
Ese sindicato se encuentra en un primer proceso electoral para definir quiénes serán los casi 400 delegados que definirán la reforma que introducirán a su estatuto sindical para armonizarlo con lo que establece el artículo 69 de la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado (LFTSE), que ordena que la elección de dirigentes tiene que hacerse a través del voto personal, libre, secreto y directo de sus afiliados.
Hasta ahora nadie, y nadie es nadie, en el gobierno les ha prestado atención. Ni siquiera el nuevo director general, Pedro Zenteno está atento al desarrollo de la elección, como si se tratara de un asunto ajeno y no con el sindicato titular de sus relaciones laborales.
A Zenteno le tocó enfrentar, como director de administración y finanzas, en diciembre de 2019, el bloqueo del tráfico vehicular que trabajadores de base del Centro Médico Nacional “20 de Noviembre”, realizaron en Avenida Coyoacán y Félix Cuevas, en protesta porque no se les entregaron oportunamente los vales de fin de año. Es decir, debiera tener conciencia que no se trata de grupos fácilmente manejables.
No se trata que autoridades intervengan en el proceso electoral, pues implicaría una violación flagrante a la maltrecha autonomía sindical -algo que seguramente a este gobierno le tiene poco cuidado-. No, sino simplemente debieran estar al pendiente de un proceso que debe ser de su interés, porque ese sindicato implica una cuestión de estado.
Pareciera que la invitación a los candidatos al liderazgo petrolero a exponer desde la mañanera de Palacio Nacional, se envió un mensaje que debe quedar claro para todos los sindicatos.
La Secretaria de Trabajo y Previsión Social del gobierno del país, Luisa María Alcalde Luján, se asumió como coordinadora del proceso electoral de la dirigencia sindical de los petroleros. Patético, por decirlo de manera eufemística, en gobierno que se asume de izquierda, democrático y anticorrupción.
El interés en el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), es comprensible, pero ¿al nivel del que acabamos de ser testigos? Parece evidente la violación al Convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que es el referente de la libertad sindical.
Desde el llamado Observatorio Ciudadano de la Reforma Laboral (OCRF), la investigadora Graciela Bersunsan, planteó que la elección de los petroleros de sus nuevos dirigentes sindicales requiere de un cambio cultural, lo cual sin duda es correcto. Desafortunadamente no reparó en la intervención gubernamental, lo que representa una violación de la autonomía sindical, garantizada por la ley laboral y por tratados internacionales firmados por México.
¿Son esas las razones por las que en el caso del SNTISSSTE, los candidatos al liderazgo no serán invitados a la mañanera de Palacio Nacional a que, en cadena nacional expongan sus propuestas?
Hubiera sido interesante escuchar a Norma Liliana Rodríguez Argüelles y a Hilario Ramírez Chávez. Ambos siguen perfilados para contender por el liderazgo en ese sindicato.
¿El mismo trato se le va a dar al SNTE, que deberá realizar elecciones antes de que concluya el actual gobierno? ¿O, como a los petroleros, a ellos sí se les dará trato de privilegio?
PARA LA AGENDA
Interesante, por demás, los resultados en el proceso electoral en las secciones del SNTISSSTE: por vez primera en muchos años, Francisco García Culebro y sus hijos, enfrentan el reto de una planilla de oposición en la sección VI EBDI’s, en la que desde finales de la década de los ochenta del siglo pasado instauró un cacicazgo inadmisible para los tiempos actuales. Para empezar, la elección mostrará que el cacicazgo está en su etapa final, que no es lo que Pancho y los suyos presumen, y dos aspectos muy importantes: 1) si el liderazgo nacional lo gana quien García Culebro no apoye, lo más probable es que él y su hijo Erick Arturo García Salamanca Varela enfrentarán denuncias penales por el corrupto manejo del multimillonario fondos de la comisión de auxilio, y 2) se pondrá en riesgo la que parece segura candidatura de Erick Arturo para sustituir a su hermano Francisco Enrique en la secretaría general seccional, estará en riesgo…