Por Verónica V. González y Arnoldo Piñón
Desde ayer y hasta mañana se registrarán quienes aspiren a la secretaria general del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM). Las elecciones se realizarán el 31 de enero, a través de una aplicación.
En las últimas semanas, el gobierno federal ha mostrado un especial interés en esa elección, a grado tal que no sólo la secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde, presentó el cronograma del proceso, sino incluso el presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a los petroleros a ejercer su voto.
“Es muy importante que todos los trabajadores sepan que pueden votar en libertad, en secreto, que depende de ellos. Juárez repetía mucho una frase bellísima de Hidalgo: “quien desee ser libre lo será”, señaló en su última gira del año pasado por el sureste.
Y fue más allá el presidente: “a los petroleros les toca decidir, porque no habrá ninguna represalia, porque nadie se enterará por quién votaron, porque no es como antes a mano alzada o que está la casilla y tienes que presentar la ficha”.
Efectivamente, a los trabajadores con su voto debiera corresponder definir quién debe estar al frente de sus interés laborales. Genera suspicacia, por decir lo menos, que sea la STPyS la que conduzca el proceso, como si ese sindicato no tuviera capacidad para organizarlo, y que el mismo Presidente de la República llame a los trabajadores a votar.
Más grave aún, que el jefe del poder ejecutivo sostenga que las elecciones sindicales no son como antes, a mano alzada.
Para empezar, esa es una contradicción, toda vez que a mano alzada han sido algunas decisiones fundamentales que este gobierno ha tomado.
Y en segundo lugar, en los hechos es un reconocimiento a que la reforma a laboral -específicamente los artículos 371 de la Ley Federal del Trabajo y 69 de la de Trabajadores al Servicio del Estado-, violenta la libertad sindical garantizada por el Convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Si bien es cierto esa reforma fue validada por la Suprema Corte deJusticia de la Nación, no significa que no contradiga lo previsto por ese tratado internacional, firmado y ratificado por nuestro país, por lo que forma parte de nuestro marco jurídico.
Lo que es particularmente grave es el hecho que la Corte ha emitido jurisprudencias en las que se establece que los tratados internacionales firmados y ratificados por nuestro país, se encuentran apenas por debajo de la Constitución.
Es importante hacer notar que el Convenio 87 prohíbe a los gobiernos intervenir en la vida interna de los sindicatos. ¿Ordenarles a través de una ley la forma en que deben realizar la elección de sus dirigentes no es intromisión?
Los trabajadores debieran tener la libertad para definir la forma en que realizan sus elecciones, ya sea a través de voto en urna, a mano alzada o de cualquier otra manera, y el gobierno tendría que ser respetuoso y no tratarlos como menores de edad.
Al establecer la ley que de no ser mediante voto personal, libre, secreto y directo, la elección será nula, no se les entregará el reconocimiento gubernamental a los dirigentes selectos. La toma de nota implica obtener personalidad jurídica, esencial para tener validez en los actos que realizan a nombre de sus representados.
Ahora bien, en cuanto a la elección del próximo dirigente sindical de los petroleros, la expectativa se centrará en su Ricardo Aldana, el ex tesorero que participó en el llamado “Pemexgate” que trasladó mil millones de pesos a la fallida campaña electoral de Francisco Labastida Ochoa en el año 2000.
Hay quien tiene la creencia que Aldana -ex senador y ex diputado federal por el PRI-, cuenta con el aval gubernamental para que ocupe el lugar que dejó vacante Carlos Romero Deschamps. ¿Sorpresa?
Según esto, de inscribir su candidatura, el ex tesorero sería el candidato a vencer por el liderazgo de los petroleros, lo que aún está por verse.
PARA LA AGENDA
El pasado lunes 10 de enero, se cumplieron 33 años del encarcelamiento de los dirigentes Petroleros, Joaquín “La Quina” Hernández Galicia, Salvador Barragán Camacho y José Sosa, acción que implicó un viraje en la conducción sindical. Famosa la frase de si se hunde Pemex, se hunde usted, dicha ante el presidente Miguel de la Madrid. Los petroleros, según esto, fueron de los apoyos de la candidatura de Cuauhtémoc Cárdenas, en las históricas elecciones de 1988, por las que llegó a la Presidencia de la República Carlos Salinas de Gortari…
