Jean Mayer, historiador del CIDE, aseguró que Centro de Investigación y Docencia Económicas enfrentó un problema hace muchos años relacionado con la dotación de cargos a exfuncionarios públicos que no habían podido obtener un cargo; sin embargo, desde inicios de los años 90 la institución cambió su rumbo.
En entrevista con Adela Micha, el especialista dijo que la institución ha garantizado la educación de personas de todos los orígenes sociales, lo cual permite que sus egresados puedan mejorar su vida desde hace décadas, por lo que se cumple.
Además de esto, dijo que la investigación y la docencia se lleva a cabo con márgenes de calidad que sobrepasan a las que hay en diversos colegios del país, sobre todo porque hay un sistema de acompañamiento para que los alumnos puedan contar con un trato especializado y mejorar la experiencia de aprendizaje.
Mayer aseguró que la declaración en la que aseguró que el conflicto dentro del CIDE está sustentada en que el periodo previo a la sucesión presidencial afecta a la institución.
Durante la charla, aseguró que el mayor descontento es que no se llevaron a cabo votaciones para elegir el nuevo titular de la esta institución, lo cual calificó como un hecho inaceptable, pese a que había otros candidatos más afines a la comunidad que José Romero.
Indicó que desde julio de 2018, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador, se comenzó a atacar a cualquier ente o mecanismo que pudiera ser englobado del concepto de neoliberal, lo cual ha llegado hasta el CIDE.
En ese contexto, a partir del cambio de titularidad en el Conacyt, dijo, se comenzó a hablar de una ley que regulara la ciencia en México y una de educación superior. Incluso, acusó a las autoridades de querer eliminar la facultad de la autonomía a los centros de educación superior.
«Cuando se publicó en el Diario Oficial, había desaparecido el artículo de la autonomía de las universidades», dijo.
El académico aseguró que la crisis no podrá resolverse sin la mediación de la Secretaría de Gobernación o de la jefa de Gobierno para convencer a la dirección, no ve una salida inmediata al conflicto.
Esto debido a que la administración de Romero no está dispuesta a negociar con ellos. Actualmente el colegio se encuentra cerrado, los manifestantes aseguran que no retirarán el bloqueo hasta que el director no abandone el cargo.