El COVID-19, enfermedad causada por el SARS-CoV-2, quitó 3.6 años de esperanza de vida a los mexicanos, reveló un estudio publicado en la revista académica Canadian Studies in Population.
El estudio Heterogeneidad en el exceso de mortalidad y su impacto en la pérdida de la esperanza de vida por COVID-19: evidencia de México fue elaborado por Víctor Manuel García, profesor e investigador de El Colegio de México (Colmex) e Hirám Beltrán Sánchez, profesor asociado de la Universidad de California.
Los profesores analizaron los datos sobre muertes por COVID-19 en México entre el 26 de marzo y el 31 de diciembre y utilizaron proyecciones de población mexicana, así como tablas de vida de 2020 por sexo, tanto de los estados como a nivel nacional.
El estudio arrojó que para finales de 2020 las mujeres mexicanas habían perdido un promedio de 2.5 años de esperanza de vida al nacer por COVID-19, cifra que se elevó a 3.6 años en hombres.
La pérdida de años de esperanza de vida varía dependiendo la región, debido a las características propias de sus habitantes y condiciones de vida.
En general los hombres perdieron mayores años de esperanza de vida que las mujeres, pero estas la perdieron a edades más tempranas.
El impacto de la pandemia de COVID-19 en México ha sido más letal que durante periodos de conflicto y violencia, por ejemplo, durante la denominada “Guerra contra las drogas” del sexenio del presidente Felipe Calderón la esperanza de vida disminuyó alrededor de 0.18 y un año para mujeres y hombres, respectivamente.
Asimismo el COVID-19 eliminó en gran medida el aumento de años de esperanza de vida como en la Ciudad de México, que tardó alrededor de 12 años en aumentar la esperanza de vida en aproximadamente 3.5 años y en Baja California, que tardó 16 años para 4.5 años más de vida.
El estudio advierte que un esfuerzo gubernamental más organizado al comienzo de la pandemia de COVID-19 en México, centrado en medidas de contención y mitigación, pudo haber disminuido las muertes en algunos estados.
Señala también que debido al retraso con el que se publican las cifras de defunciones por coronavirus el impacto en la esperanza de vida en México podría ser mucho mayor.