El mandatario Andrés Manuel López Obrador se refirió a la muerte del joven veracruzano, José Eduardo Ravelo Echavarría, ocurrido en julio pasado y cuyo expediente, al final, atrajo la Fiscalía General de la República.
Reiteró que el caso ya está en manos del fiscal Alejandro Gertz Manero, al cual le dio toda su confianza para resolver la muerte del muchacho, al parecer, a manos de cuerpos policiacos municipales o estatales, todavía sin definir.
Ravelo Echavarría fue detenido por agentes policiacos municipales en un parque del centro de la ciudad de Mérida, en julio pasado, presuntamente por alterar el orden público, por lo que fue remitido a la cárcel municipal.
Sin embargo, después de ser liberado, a las 24 horas, el joven sufrió tortura y abuso sexual por cuatro agentes policiales, según su propia denuncia. Unos días después, José Eduardo falleció en un hospital a causa de las lesiones sufridas.
Cuatro agentes policíacos municipales fueron detenidos por investigaciones de la Fiscalía General del Estado de Yucatán como presuntos responsables del ataque, aunque después fueron liberados por falta de pruebas.
Pero el caso dio otro giro cuando se conoció que, en su denuncia, Ravelo Echavarría identificó como sus agresores a policías estatales y no de la jurisdicción de Mérida.
La madre del joven muerto acudió, con asesoría de grupos activistas de derechos humanos, a plantear el caso al mandatario López Obrador, quien le prometió justicia. Y este mes de octubre, la Fiscalía General de la República atrajo el expediente.
Por otra parte, a López Obrador le preguntaron acerca de que si el gobernador de Yucatán, Mauricio Vila, podría incorporarse a su gabinete, a lo que el Presidente dijo que no sería conveniente porque “(Vila) está haciendo muy buen gobierno”
En cuestión de inversiones –dijo AMLO- a los yucatecos les convendría mantener a su gobernador Mauricio Vila. “Para qué experimentar”, enfatizó el mandatario federal ante un gobernador sonriente.
