El papa Francisco dijo que los líderes del G20, que se reunirán este mes en Roma, deben trabajar por una salida creativa y “universal” a la crisis suscitada por la pandemia, que, a la vez, tenga en cuenta las asimetrías entre los países.
Para el papa, aunque en el “imaginario colectivo existe una idea de que se puede recomenzar con una reconstrucción de las cosas como eran hasta ahora”, la pandemia de COVID-19 implica “un desafío al cambio”.
El papa afirmó que la cumbre del G20, que se celebrará a finales de este mes en Roma, “debe plantearse seriamente la relación entre los países no desarrollados y los desarrollados” y tener en cuenta las asimetrías entre las naciones, por ejemplo, en términos sanitarios.
El argentino Jorge Mario Bergoglio sostuvo que de las crisis “no se sale solo” y alentó una respuesta de carácter “universal”.
“La pandemia nos involucionó provisoriamente y todos tenemos ganas, e impulso, de salir. Pero hay que ver cómo universalizamos esto: no se puede salir en particular, hay que salir en universal”, sostuvo.
Francisco también abogó por que la cumbre del G20 sirva “para que se bajen las tensiones a nivel mundial” ante las “escaladas de violencia que lo que provocan es más violencia”.
En otro tramo de la entrevista, el sumo pontífice elogió a Angela Merkel, que se apresta a dejar su cargo como canciller de Alemania tras 16 años en el poder.
El papa calificó a la canciller alemana como “una de las grandes líderes que pasarán a la historia” y resaltó “no es una mujer fantasiosa” porque sus ideales “se encarnaron concretamente”.
Además, destacó que la tarea desempeñada por Merkel “es importante también como liderazgo femenino” y sostuvo que “en política las mujeres han siempre dado un buen aporte y más cuando realmente la llevan en el corazón”.
“Creo que la gestión de Angela Merkel es un hito interesante en la política mundial y una llamada a las mujeres que sienten la vocación política”, afirmó.
En la entrevista, Francisco también se refirió a los viajes que planea realizar y, en este sentido, confirmó que a inicios de diciembre próximo visitará Grecia y Chipre.
De cara a 2022, el papa dijo que tiene “en la cabeza” la posibilidad de visitar Congo y Hungría.
“Además, todavía tengo que pagar la cuenta atrasada del viaje a Papúa Nueva Guinea y Timor del Este”, indicó.