Un menor de edad fue asesinado a golpes por parte de su familia adoptiva el pasado 29 de septiembre, así lo demostró el resultado de la necropsia que le fue realizada; por este hecho la Fiscalía General de Justicia de Chiapas detuvo a Sandival «N» y Elena «N», reconocidas como las mamás del pequeño, como presuntas responsables por la muerte del menor.
El niño de 11 años, de nombre «Carlitos», fue reportado como desaparecido por sus vecinos de la comunidad de Chiapa de Corzo aquel 29 de septiembre, quienes lo comenzaron a buscar inmediatamente para tratar de dar con su paradero, sin embargo, al siguiente día se enteraron que la familia del pequeño se encontraba en el Servicio Médico Forense de Tuxtla Gutiérrez, hasta donde se habían trasladado para recoger el cuerpo del pequeño «Carlitos».
Aunque en un un inicio los familiares aseguraron que el menor había muerto por un accidente, de acuerdo con los resultados arrojados por la necropsia realizada la causa de muerte fue homicidio doloso; además que antes de morir fue torturado ya que su cuerpo presentaba fracturas en las costillas y en los dedos.
«Carlitos» era golpeado con frecuencia por sus mamás
De acuerdo con información proporcionada por los vecinos, «Carlitos», quien vivía en la colonia Monte Bello, en Chiapa de Corzo, era golpeado con frecuencia por sus «mamás», ya que se dedicaba a vender chicharrones para aportar dinero a su casa, sin embargo, cuando no agotaba su mercancía presuntamente era agredido físicamente, razón por la cual siempre que salía a vender sus productos portaba una sudadera manga larga, gorra y cubrebocas.
Además que en muchas ocasiones se veía al pequeño con sus ojos rojos. El temor del menor hacia sus familiares era tal que no aceptaba la ropa que sus propios vecinos le regalaban, por miedo a ser castigado. Debido a esto fueron ellos los que en varias ocasiones reportaron ante el DIF municipal a sus agresoras y las denunciaron por maltrato infantil, sin embargo, suponen que debió haber una omisión en la investigación.
La teoría que mantienen los vecinos es que las agresoras al parecer conocían a alguien al interior de la institución, ya que alguien les avisaba cuando las autoridades iban de visita a su domicilio para conocer la situación del menor. Sandival y Elena «N» son profesionistas, una es maestra jubilada y la otra empleada del IMSS.
De acuerdo con la investigación y las aportaciones realizadas por los vecinos, por Sandival y Elena «N» adoptaron a «Carlitos» con el objetivo de darle una vida digna ya que su madre biológica, una mujer de 23 años originaria de Puerto Madero, decidió entregarles al menor debido a que al ser de bajos recursos no contaba con la posibilidad de criarlo y educarlo.
Hecho el procedimiento de adopción «Carlitos» fue trasladado a Chiapa de Corzo en donde hasta el pasado 29 de septiembre vivió con sus «Madres» adoptivas. Una vez ocurrido su asesinato la Fiscalía del estado ubicó a la madre biológica de «Carlitos» quien fue informada de su muerte y el cuerpo del menor fue llevado a Tapachula, su lugar de residencia, con el objetivo de que fuera sepultado ahí.
