Entre enero y agosto, la cartera de crédito vigente de los 51 bancos del país disminuyó 8.5% anual al tener un saldo de cinco billones 227 mil millones de pesos, reportó la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
La caída fue resultado principalmente de menores financiamientos a empresas y créditos de personales, los cuales bajaron 14.4 y 11.2 por ciento, respectivamente, durante los primeros ocho meses del año.
De manera general, los créditos al consumo descendieron 5.5 por ciento, respecto al mismo lapso del año pasado, y registraron un saldo de 964 mil millones de pesos.
Este portafolio agrupa los financiamientos automotrices, de nómina, tarjetas de crédito, así como préstamos personales.
A pesar de estos resultados, el crédito ya muestra una recuperación y será parte esencial de la recuperación económica tras la crisis sanitaria, de acuerdo con Daniel Becker, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM).
“Evidentemente la banca seguirá siendo un elemento que aporte, junto con otros agentes económicos, a la recuperación de la economía”, dijo en una conferencia de prensa realizada el 15 de septiembre.
A detalle, los créditos automotrices bajaron 7.4 por ciento, con 143 mil millones de pesos, al tiempo que las tarjetas de crédito cayeron siete por ciento, al tener 356 mil millones de pesos, de acuerdo con la CNBV.
Por otra parte, el órgano regulador que encabeza Juan Pablo Graf precisó que el Índice de Morosidad (IMOR) del sector bancario fue de 2.32 por ciento al cierre de agosto, lo que significó un aumento anual de 0.27 puntos porcentuales.
Además, en el acumulado de enero a agosto los bancos reportaron ganancias por 113 mil millones de pesos, monto mayor en 39.2 por ciento frente a lo registrado en igual lapso de 2020.