El portavoz de la oficina de Abbott, Mark Miner, dijo en un comunicado que el gobernador, quien está completamente vacunado contra el COVID-19, se encuentra en buena forma física y no experimenta ningún síntoma.
Agregó que se le está administrando el tratamiento de anticuerpos Regeneron y que permanecerá confinado en la residencia oficial, mientras se le practican tests a diario.
“Se ha informado a todo el mundo que ha tenido contacto cercano con el gobernador. La primera dama de Texas, Cecilia Abbott, ha dado negativo”, indica el texto.
El contagio de Abbot se produce en un momento en que Texas es uno de los estados con mayor incidencia del COVID-19, tras la expansión de la variante delta en el país.
El gobernador, un firme detractor de los mandatos de cubrebocas, emitió en julio una orden para prohibir a los Gobiernos locales y los distritos escolares que exigieran llevar esta prenda.
De hecho, quienes no cumplan con esta orden pueden enfrentarse a una multa de mil dólares.
Según los datos de la Universidad Johns Hopkins, Texas es el segundo estado de Estados Unidos en número de casos, tras Florida, con 3.3 millones de contagios y 54 mil 474 muertos