Reporteros sin Fronteras (RSF) comunicó que 17 periodistas, entre ellos cinco mexicanos y un español, se han sumado a su denuncia contra la empresa israelí NSO Group, creadora del programa de espionaje Pegasus que habría sido utilizado por distintos Estados para controlar sus movimientos.
Entre los denunciantes se encuentra el español Ignacio Cembrero, “muy probablemente vigilado por Marruecos”, según RSF, o los mexicanos Marcela Turati, Alejandra Xanic, Ignacio Rodríguez, Jorge Carrasco y Álvaro Delgado, que podrían haber sido controlados por su gobierno.
“Todos estos periodistas han ejercido un periodismo libre, independiente y sujeto al interés público. Saben o tienen serias razones para temer haber sido espiados por sus gobiernos”, señaló la organización.
Los nuevos 17 informadores demandantes, procedentes de siete países distintos, se identifican como “potenciales o reconocidas víctimas de la vigilancia de Pegasus“, y denunciarán también a todos los responsables establecidos por la investigación judicial abierta, sumándose a la denuncia que RSF presentó ya el 20 de julio junto a otros dos periodistas francomarroquíes.
RSF informó además que ha acudido a Naciones Unidas para pedir a los responsables de libertad de expresión, derecho a la privacidad y defensores de Derechos Humanos y la lucha antiterrorista que obtengan explicaciones de los Estados sospechosos de haber recorrido al programa informático para espiar a periodistas.
Le solicita además que exija una “estricta regulación internacional de la exportación, venta y uso de programas de vigilancia como Pegasus”, una moratoria internacional sobre la venta de estos softwares, así como que investiguen la utilización que se ha hecho de él.
Entre los periodistas hay dos originarios de Azerbaiyán, cinco mexicanos, cinco indios, un español, dos húngaros, un marroquí y un togolés, cuyos nombres se encontraban en las listas del programa de NSO que fueron reveladas por varios medios internacionales en julio.
“Las denuncias de estos periodistas confirman la amplitud de la vigilancia desplegada gracias al programa Pegasus de NSO. La investigación debe establecer todas las responsabilidades, ya sean las personas implicadas dirigentes de empresas o gobernantes del país”, indicó en el comunicado la portavoz de RSF, Pauline Adès-Mével.