El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, descartó este jueves “problemas” con Estados Unidos, pese a los reclamos en ese país por los presuntos incumplimientos del nuevo Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Sus declaraciones se producen en medio de la visita a Washington de la secretaria de Economía de México, Tatiana Clouthier, para revisar los avances del T-MEC con la secretaria estadounidense de Comercio, Gina Raimondo, y la representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai.
Un día antes de su viaje, senadores y congresistas estadounidenses de ambos partidos enviaron una carta al presidente Joe Biden para denunciar “la política energética proteccionista” de López Obrador, por limitar el acceso a los mercados de las compañías estadounidenses.
Como recordó el mandatario, México ha anclado su pronóstico de recuperación mayor al 6 por ciento del producto interno bruto (PIB) para 2021 al T-MEC, que el 1 de julio de 2020 reemplazó al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
“Está creciendo el número de empresas que se están instalando en México y, bueno, la mejor forma de medirlo es lo de la creación del empleo, de los que se inscriben en el seguro social”, sostuvo.
Pero su Gobierno ha despertado críticas de empresarios mexicanos y estadounidenses por desincentivar la inversión, en particular por su política energética que prioriza a las empresas del Estado, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex).
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la cúpula del sector privado, pidió este miércoles al Gobierno mexicano que incentive la inversión y los proyectos de infraestructuras.
“El decir que hay problemas, que hay desconfianza en la inversión, es un discurso que tiene que ver más con la politiquería, con los que no están de acuerdo con nosotros, con la oposición”, indicó López Obrador.