El presidente Andrés Manuel López Obrador dejó en claro que no se realizarán giras abiertas hasta que se lleve a cabo la consulta popular el próximo domingo 1 de agosto.
En la conferencia matutina llevada a cabo en Acapulco, Guerrero, el mandatario mexicano señaló que, ante la veda electoral emitida por el Instituto Nacional Electoral (INE), las giras seguirán a puerta cerrada.
“De todas formas vamos a ser respetuosos, no vamos a hablar del tema durante todo este tiempo y decidimos no llevar a cabo reuniones abiertas”, puntualizó.
López Obrador detalló que seguirán sus recorridos por el país para recoger las peticiones de la ciudadanía, así como supervisar obras y los programas sociales de su Administración.
“El recorrido sirve para recoger peticiones, demandas, que la gente no se sienta sola, abandonada, que el gobierno sea itinerante, que el gobierno de la República no solo tenga como sede Palacio Nacional”, argumentó.
Este jueves, el Instituto Nacional Electoral (INE) detalló que a raíz de esta consulta popular “debe suspenderse todo tipo de propaganda gubernamental, de acuerdo con el artículo 35 de la Carta Magna”.
“En este lapso y hasta la conclusión de la Consulta Popular, solo están permitidas las campañas de información de las autoridades electorales, las de servicios educativos, de salud y de protección civil”, externó en un comunicado de prensa.
En un origen, la consulta convocada por el presidente López Obrador preguntaba si enjuiciar por corrupción y otros delitos a los expresidentes Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), Ernesto Zedillo (1994-2000), Vicente Fox (2000-2006), Felipe Calderón (2006-2012) y Enrique Peña Nieto (2012-2018).
Pero la Suprema Corte la modificó de manera que se preguntará a los mexicanos si están de acuerdo en llevar a cabo “acciones con apego al marco legal para esclarecer las decisiones políticas tomadas en el pasado por los actores políticos“.
El jueves arrancó oficialmente la campaña de difusión para promover la consulta popular del 1 de agosto, la primera de la historia del país, la cual requiere de la participación del 40 por ciento del censo para ser vinculante.