El Congreso de Guerrero presentó una iniciativa para que no se permita el matrimonio forzado entre menores de edad, principalmente en la región de la Montaña, en donde se fomenta la unión civil arregladas, dijo la diputada integrante del grupo parlamentario del Partido del Trabajo (PT), Leticia Mosso Hernández.
Esto se da después que autoridades de los tres órdenes de gobierno conformaron una coordinación intersecretarial para “erradicar” la venta de niñas o de matrimonios arreglados de menores de edad en la región de la Montaña de Guerrero atribuida a una práctica ancestral de «usos y costumbres».
Hay que recordar que se ha documentado que en esta región de la entidad, por décadas, las menores de edad han sido vendidas por sus padres, principalmente indígenas de escasos recursos, a cambio de ganado, cervezas o dinero.
En entrevista, la legisladora refirió que ella presentó esta iniciativa, que fue turnada a Comisiones, en donde se dispone de 30 días para analizarla y emitir un dictamen para discutirla ante el pleno y aprobarla.
Reconoció que está práctica se da por sus usos y costumbres, por eso se ha presentado una reforma a la Constitución del estado, para defender los derechos humanos de los menores de edad.
La legisladora del PT, Mosso Hernández, aseguró que todas las fracciones parlamentarias están comprometidas para defender los derechos humanos de las niñas y los niños, por lo que se seguirá en lo que resta de la 62 legislatura con estas iniciativas.
Pero además, dijo que es necesaria la participación de los tres órdenes de gobierno, que tienen que ser coadyuvantes, para no permitir que se continúe con la práctica de los matrimonios forzados entre menores de edad.
Mencionó que es necesario frenar la compra-venta de las niñas, incluso, de mujeres adultas, que se realiza la mayoría de las veces por saldar una cuenta o tener un ingreso.
Consideró que aquí, es sumamente importante la participación de los maestros rurales, pues a través de la educación generan mayor conciencia sobre los derechos que tienen los menores de edad, en donde se aplica los usos y costumbres.