En la Ciudad de México hay escuelas que decidieron mantener el trabajo de manera virtual hasta terminar el presente ciclo escolar y es el caso de la escuela primaria Andrés Iduarte, ubicada en la alcaldía Gustavo A. Madero, debido a que 70 por ciento de los padres de familia lo rechazaron y sólo tres de 26 maestros se manifestaron dispuestos a asistir.
La Secretaría de Educación Pública (SEP) ordenó a los preescolares, primarias y secundarias en la capital realizar una consulta a sus docentes y padres de familia para decidir de manera voluntaria la asistencia a partir de hoy y hasta el próximo 9 de julio.
La maestra Andrea Angélica Arellano Hernández, directora de la primaria Andrés Iduarte, que se encuentra en Av. Acueducto 584-1, La Laguna Ticomán, Gustavo A. Madero, explica en entrevista que la encuesta que realizó su plantel tomó dos aspectos: el primero fue valorar el estado emocional de los niños y cómo han vivido el trabajo en este ciclo escolar, y el segundo fue dirigido sólo a padres de familia.
Como resultado 70 por ciento de los padres de familia consultados se manifestó en favor de un regreso a clases a partir del nuevo ciclo escolar en agosto próximo, una vez que esté más avanzado el programa de vacunación.
El 30 por ciento restante señaló que está de acuerdo con el retorno a las aulas el 7 de junio, “pero en la cuestión de los filtros hubo un porcentaje que no estaba de acuerdo en firmar la carta de responsabilidad sobre el riesgo de la escuela (de que sus hijos podrían contagiarse de Covid-19), otro porcentaje también alto que no tenía tiempo para ir a apoyar en los filtros de salud con el Comité de Salud (de la escuela) y otros tantos que tampoco estaban en posibilidades de atender los horarios establecidos, que no pueden ser jornadas mayores de cuatro horas).
“Entonces, nos dimos cuenta que no teníamos las condiciones para realizar la reapertura porque, primero, la mayoría de los padres prefirieron que terminara el ciclo escolar, y segundo, los que sí estaban en disposición, querían delegar las responsabilidades a la escuela, porque no tenían tiempo de ayudar en los filtros o que no estaban de acuerdo con los horarios”, manifestó.
La carta responsiva que deben firmar los padres de familia, entre otros aspectos dice: “Manifiesto como padre de familia, soy consciente de los riesgos que pueden implicar el traslado y la estancia de mi hijo en la escuela derivado de la pandemia por Covid-19, la cual sigue vigente en todo el mundo a mayor o menor escala, razón por la cual deslindo de toda responsabilidad a la Escuela y a todos los que laboran en ella, así como a cualquiera de sus representantes legales ante cualquier situación adversa que pudiera suceder durante su estancia de mi hijo en la misma”.
Otro de los aspectos que dificulta el regreso a clases en este plantel es que, de los 26 docentes, sólo tres dijeron que sí asistirían a las aulas, y de las personas auxiliares que ayudan con la limpieza y el mantenimiento, solo una de cuatro aceptó.
Para la directora de la escuela Andrés Iduarte el sentido voluntario que ha dado el Gobierno federal a la asistencia a los planteles no da los resultados esperados porque “todavía no estamos preparados para asumir esos compromisos, yo les decía a los maestros que ese carácter de voluntarios tiene que ver justo con eso, con una toma de decisión en donde no voy a culpar a un tercero por la decisión que tome, pero al final tengo que asumir la responsabilidad que me toca y eso como país, como sociedad, nos está costando mucho trabajo».