La economía de México perdió fuerza durante el primer trimestre del año frente a los tres últimos meses de 2020, aunque mostró una mejora respecto a la estimación previa del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El Producto Interno Bruto (PIB), indicador de la economía del país, mostró una expansión de 0.8% con respecto al trimestre anterior, el último de 2020, muestran cifras desestacionalizadas del Inegi.
La cifra se coloca por arriba del 0.4% del dato preliminar, estimado a finales de abril, pero muy por debajo del crecimiento del 3.2% del trimestre previo.
Los tres sectores de la economía fueron revisados al alza y, bajo la misma comparación trimestral, las actividades primarias crecieron 0.7%, las secundarias –lideradas por la manufactura– se incrementaron 0.5% y las terciarias o servicios, 0.9%.
México, la segunda mayor economía de América Latina, sufrió en 2020 una contracción de 8.5%, su peor desempeño desde 1932 durante la Gran Depresión, por el devastador golpe de la pandemia.
Durante el primer trimestre, la economía de México sufrió los efectos de medidas restrictivas para reducir los contagios de la segunda ola de Covid-19, además de un desabasto de energéticos durante febrero por tormentas invernales en Estados Unidos. No obstante, se prevé que la recuperación sea más vigorosa a partir del segundo trimestre.
Para el resto del año, el mayor dinamismo de la economía mexicana sería impulsado principalmente por un incremento en la demanda de Estados Unidos por exportaciones de su vecino del sur, dijo el lunes la agencia calificadora Moody’s, la cual prevé un crecimiento de 5.6% durante todo 2021.
En su comparación anual, la segunda mayor economía de América Latina se contrajo 3.6%, una caída levemente inferior a la de 3.8% estimada por el Inegi preliminarmente, pero con la que liga ocho trimestres de contracción.