Lejos están los días en que Andrés Manuel López Obrador manifestaba que su administración mantendría una política de «brazos abiertos» a migrantes. Tras el conflicto entre México y Estados Unidos ocasionado por las amenazas de Donald Trump de imponer aranceles a productos mexicanos y el infame acuerdo alcanzado entre ambos países, el panorama para miles de trabajadores internacionales no ha hecho sino empeorar.
Así, según cifras difundidas por el medio Animal político, en siete meses de gobierno de AMLO han sido arrestados más de 105 mil 384 migrantes. Según destaca el mismo medio, junio fue el mes en que más detenciones de migrantes se llevaron a cabo en territorio mexicano, con 23 mil 917 arrestos. Cifra cercana al récord establecido en 2006 por las 24 mil detenciones realizadas por la administración del panista Vicente Fox.
De acuerdo a las cifras recopiladas por el citado medio, en siete meses las detenciones de migrantes ya superaron las realizadas en todo 2017 ( cuando se registró el arresto de 93 mil 846 migrantes) y está muy cerca de superar el total de arrestos realizados en 2018 (138 mil).
Mientras el gobierno de López Obrador insiste en que el enfoque de intervención de su Guardia Nacional militar en la crisis migratoria es de «respeto a los derechos humanos», lo cierto es que la militarización de las fronteras norte y sur, con el despliegue de elementos de la Guardia Nacional, el Ejército y la Marina, es quizás una de las manifestaciones más dramáticas de este «cambio» en la política migratoria mexicana. Las imágenes de las redadas en Estados Unidos este fin de semana nada tienen que envidiarle a las redadas en estados del sur de México como Chiapas realizadas desde finales del mes pasado.