Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, se congratuló este viernes que se hayan anulado las sentencias contra el exmandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva por el caso Lava Jato.
La decisión del juez Eduardo Fachin se refiere a tres procesos en que Lula fue juzgado por un tribunal de primera instancia de Curitiba, a cargo del entonces juez Sergio Moro, quien no tenía en su momento “competencia jurídica” para analizar esos casos, según explicó la propia Corte Suprema de Brasil, cuyo pleno deberá confirmar esa decisión.
De acuerdo a la decisión de Fachin, responsable en el Supremo de la operación anticorrupción Lava Jato, por la cual fue procesado el ex presidente, esos tres casos deberán pasar ahora a la órbita de la Justicia federal en Brasilia, la cual decidirá sobre el curso de cada uno de los casos.
La decisión afecta a procesos referidos a un apartamento triplex en el balneario de Guarujá, en el litoral del estado de Sao Paulo; a una casa de campo en la localidad paulistana de Atibaia, y a una investigación sobre el Instituto Lula, fundado por el ex mandatario.
En el primer caso, Lula fue condenado a 12 años de prisión, que fueron 17 años en el caso referido a la casa de campo, en tanto que en el asunto respecto al instituto aún no hay sentencia firme.
Por esas condenas, Lula llegó a pasar 580 días en prisión y fue liberado una vez que el Supremo alteró su propia jurisprudencia y decidió que una persona solo puede ingresar a la cárcel cuando ya no tenga apelaciones disponibles, que no era el caso del exmandatario.