* Morena ha Recibido 5 mil 727 Millones en los Últimos 5 años
*No hay Registro de Supuestas Devoluciones de Prerrogativas
*Tampoco en la Tesorería de la Federación o en el INE
*Spot de Morena: Ningún Mexicano se Quedará sin Vacuna
*Que se Sepa, no ha Cedido un Centavo de sus Prerrogativas
*Y Mucho Menos ha Comprado las Inmunizaciones que Promete
Por Gerardo Lavalle
Un fidecomiso en BBVA podría ser el detonador para que el Instituto Nacional Electoral (INE) iniciara la investigación sobre el uso de los recursos públicos entregados a Morena en los dos últimos años.
Una fuente de esa institución bancaria reveló –probablemente de manera inconsciente- que Morena no utilizó el total de las prerrogativas otorgadas por el INE durante 2020 y que en lugar de devolverlas creó un Fideicomiso que administra el banco más importante del país.
MISIÓN POLÍTICA buscó, sin resultado, información en el propio Banco y en la Tesorería de la Federación para corroborar que los “sobrantes” del año pasado se entregaron al Gobierno federal para la compra de vacunas.
Consultó otras fuentes y confirmaron lo del Fideicomiso. Sin embargo, por el secreto bancario no aportaron mayores datos.
El problema que surge es que el Fideicomiso no está integrado con recursos privados sino públicos. Se trata de dinero proveniente de los impuestos y que se asignaron al INE para la operación del 2020 y, por lo tanto, la Secretaría de Hacienda tendría la obligación de conocerlo.
Extraña que en el propio INE no se haya concluido la fiscalización del año pasado y se ignore si Morena gastó las prerrogativas en lo que la ley marca: actividades ordinarias: sueldos y salarios de personal, arrendamiento de inmuebles, papelería; viáticos, propaganda institucional y gastos de campaña –hubo dos elecciones estatales: Hidalgo y Coahuila-, además de actividades específicas como capacitación de personal, acciones editoriales, efectuar investigaciones, entre otros rubros.
De acuerdo con los datos oficiales del INE, Morena ha recibido 5 mil 727 millones en los últimos 5 años. En solamente 3 años –desde que ganó las elecciones presidenciales-, el partido oficialista ha obtenido 4 mil 376 millones de pesos.
En 1997, el dirigente nacional de Morena, Andrés Manuel López, anunció que su partido donaría 103 millones de pesos para los damnificados de los sismos del 7 y 19 de septiembre. Para ese entonces había recibido 386 millones de pesos por concepto de prerrogativas de parte del INE.
La hoy secretaria de Energía, Rocío Nahle, entonces coordinadora de los diputados federales de Morena confirmó que su partido atendería el llamado de su líder y aportaría el 25 por ciento de sus recursos oficiales.
Sin embargo, los recursos no se entregaron a la Tesorería o al INE para que se aplicaran a favor de los damnificados. Seis días después, del terremoto, se creó el Fidecomiso “Por los demás”, en el que se recibieron aportaciones de particulares y presuntamente del propio partido, situación que jamás comprobó el INE e, incluso, acusó a Morena de engañar con el destino de los recursos, toda vez que no hay comprobación de la entrega de los mismos a los damnificados.
Para “desmentir” la versión del organismo autónomo, López Obrador informó que se había entregado el dinero en efectivo de manera directa. Esta respuesta generó que el Consejo General del Instituto le recordara que los partidos políticos no pueden recibir ni entregar dinero en efectivo a los ciudadanos.
El tema escaló cuando se difundieron los videos en los que se muestra al carrusel de empleados de Morena retirando cantidades similares: 50 mil pesos, sin que se conozca, hasta hoy, el paradero de lo aportado por ciudadanos y el destino de las prerrogativas anunciadas como donación para los damnificados.
En agosto de 2019, Yeidckol Polevnsky, ya instalado el gobierno de la Cuarta Transformación y bajo el argumento de la “austeridad republicana”, anunciaba que el partido devolvería al INE el 50 por ciento de las prerrogativas e incluso aumentó a 75 por ciento, para hacer frente a lo que ya se avistaba: la crisis económica y el nulo crecimiento del PIB, asunto que se corroboró cuando el INEGI y el Banco de México dieron a conocer que la economía había crecido 0.01 por ciento. Esa décima salvó al país de ser calificado en estado de recesión. Pero, a pesar de sus promesas y declaraciones, Polevnsky reconoció que no se había entregado la mitad de sus prerrogativas por no encontrar mecanismos legales para ello.
La ley establece que no es posible que los partidos hagan una devolución ni pueden destinarlas a otras actividades. Aseguró que ya estaba en pláticas con el Instituto Nacional Electoral para no recibir parte de sus recursos y que éstos se destinen a la hacienda pública con el fin de aplicarse en obras y programas sociales.
Nunca ocurrió. Porque para poder devolver el dinero el INE tendría que retenerlo. Es la única manera en que desde el INE se puede hacer la transferencia a la Tesorería de la Federación mediante el acuerdo de que los recursos serán destinados para determinada acción y no para otras.
UNA HISTORIA QUE SE REPITE EN 2020-21
A pesar de haber sido demostrado jurídicamente –el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación rechazó “la devolución” de Morena por no apegarse a derecho- que Morena no ha regresado un céntimo ni al INI ni entregado a la Tesorería de la Federación, desde mediados del año pasado se dio a conocer que regresaría el 50 por ciento de sus prerrogativas para atender la crisis sanitaria.
E incluso, desde Palacio Nacional, el presidente López llamó al resto de los partidos políticos nacionales: PAN, PRI, PVEM, MC, PRD, PT y PES –éste último sin registro, pero con legisladores federales- a que hicieran lo mismo.
Polevnsky, junto con el entonces coordinador de los diputados, Mario Delgado, impulsaron la reducción de las prerrogativas al 50 por ciento y el legislador expresó: que sepa la gente quien se opone”. Porque la respuesta de las oposiciones e incluso de los aliados de Morena, fue negativa.
PRI, PAN, MC y PRD establecieron que aceptar el recorte implicaría dejarlos sin recursos para sus actividades ordinarias (suelos y salarios, entre otros temas) por lo cual quedarían en estado prácticamente de inanición para solventar su sobrevivencia.
A Morena no le importaba regresar la mitad de los recursos públicos. Tenía y tiene más del doble del más cercano de sus opositores. Este año, la diferencia es casi 2 veces mayor a los que recibirá el PAN. La cifra oficial de prerrogativas para 2021 concede a Morena 2,195 millones, mientras que a Acción Nacional le otorga 1,213 millones de pesos.
Al iniciarse el proceso electoral 2021, los partidos políticos pueden utilizar los tiempos de radio y televisión para promover sus plataformas y logros. No pueden hacer proselitismo a favor de uno o varios candidatos y tampoco promover las obras del gobierno federal.
La restricción alcanza a los estados en donde habrá renovación de gobernadores, diputados y presidentes municipales.
A pesar de la prohibición, Morena ha lanzado una agresiva campaña –con dulce voz de la locutora- para informar de los avances del gobierno de la cuarta trasformación, desde preguntar cuándo un Presidente se había atrevido a desparecer el Estado Mayor Presidencial -hecho consumado con la toma de posesión en diciembre de 2018. Pero ahora se recuerda- o estar en igual de circunstancias con los ciudadanos porque ahora se le puede juzgar por delitos graves –ya existía-, porque el artículo 108 de la Constitución establecía: “El Presidente de la República, durante el tiempo de su encargo, sólo podrá ser acusado por traición a la patria y delitos graves del orden común”. El añadido habla de delitos electorales.
Lo más importante para Morena lo revela en sus spots: ningún mexicano se quedará sin vacuna, porque Morena es la “esperanza de México”.
Que se sepa hasta ahora Morena no ha cedido un centavo de sus prerrogativas, no ha comprado vacunas –y si lo hizo cometió un delito-, su personal y militantes más simpatizantes no están autorizados para aplicarlas.
Sin embargo, el INE a través del Comité de Radio y Televisión avala los textos de los spots, aunque no correspondan a la verdad.
El asunto se agrava cuando Morena se arroga el derecho de promover la vacunación en tratándose de una acción del ESTADO representado por el Gobierno, pero no es un programa o servicio que esté ligado a un partido.
En el ámbito legislativo, diputados y senadores del partido oficialista, insisten en que ya han devuelto el 50 por ciento de las prerrogativas.
No hay ningún registro que así lo demuestre.
Por eso ahora que MISIÓN POLÍTICA conoció de la existencia de un Fideicomiso de Morena en BBVA creado para administrar los “recursos sobrantes” de las prerrogativas del año pasado, se hace necesaria la acción del INE.
Porque comprobaría que no se utilizaron los recursos como marca la Ley General de Partidos Políticos y que para las campañas de 2021 habrá más dinero del otorgado legalmente.
Si Morena puede dejar de gastar las prerrogativas en los rubros que establece el INE en base a la legislación de partido y electoral para después utilizarlos en campañas, no hay garantía de la equidad que se pregona.
Ya en pleno proceso electoral sorprende que los partidos de oposición no hayan revisado los gastos de Morena y tampoco enterado de la presunta existencia del Fideicomiso en comento.
La historia repetida lo comprueba: Morena engaña con la “esperanza de México”.
PRERROGATIVAS DEL INE PARA MORENA
2021 2,195
2020 1,654
2019 1,557
2018 415
2017 380
(Números cerrados)