La ONU reclamó este martes a las potencias internacionales una clara condena del golpe de Estado en Birmania y les pidió que rechacen el plan de los militares para celebrar unas nuevas elecciones.
“La propuesta de los militares para celebrar elecciones otra vez debe ser desalentada. Es importante que unamos nuestros esfuerzos para ayudar a asegurar que el Ejército respeta la voluntad del pueblo birmano y respeta las normas democráticas”, dijo la enviada de la organización para el país, Christine Schraner Burgener.
La diplomática trasladó ese mensaje a las potencias en una reunión a puerta cerrada del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, convocada de urgencia tras el golpe de este lunes.
Aunque el encuentro fue privado, la ONU hizo pública la intervención de Schraner Burgener, quien insistió en la necesidad de que el mundo muestre unidad ante la situación en Birmania.
Hasta ahora, la reacción de las potencias con asiento permanente y poder de veto en el Consejo de Seguridad ha sido dispar, con Estados Unidos y las naciones europeas condenando con claridad el golpe, mientras que Rusia y China han evitado hacerlo y dicen confiar en un arreglo de la crisis.
El Gobierno ruso, de hecho, lamentó que «las fuerzas políticas del país no hayan podido resolver sus diferencias tras las elecciones parlamentarias de noviembre de 2020» y expresó su confianza en quelos militares convoquen a nuevas elecciones parlamentarias el próximo año.