Los efectos de la pandemia por Covid-19 en el país han provocado que se dejen de facturar 2 mil 329 millones de pesos en lo que va de 2020, según el informe que presentó la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem) en el marco de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara.
El coordinador de la Comisión Estadística de la Caniem, Ignacio Uribe Ferrari, señaló que antes de la pandemia se estimaba una venta de 11 mil 126 millones de pesos durante el año, lo que ya de por sí era una reducción con respecto a 2019, aunque de apenas uno por ciento.
“Estimamos que la facturación neta de libros impresos sea de 8 mil 797 millones de pesos en el escenario más optimista, lo que significa una reducción de 22 por ciento, pero en un escenario más pesimista podría llegar a menos 29 por ciento. Es decir, habríamos dejado de facturar de un año a otro 2 mil 329 millones de pesos en el escenario positivo y 3 mil 662 millones en el negativo”, calculó.
En libros, esto significa algo así como 25 millones de libros menos vendidos, con estimaciones de cerrar el año con ventas por alrededor de 99 millones de libros, lo que significa una reducción de 20 por ciento.
Antes de la contingencia “la estimación era vender 124 millones de ejemplares, por lo cual estimamos 25 millones de piezas menos en el escenario positivo, y en la visión más negativa podrían ser 35 millones de ejemplares menos que en 2019”, especificó Uribe.
En el análisis presentado por la Caniem, su presidente, Juan Luis Arzoz Arbide, explicó que se tomó en cuenta la producción y comercialización de libros impresos, la distribución de la venta por canales y temáticas, el mercado de ediciones digitales, las cifras del desempeño en 2020, la prospectiva de ventas y un comparativo entre 2019 y 2020.
El director de la Caniem, Alejandro Ramírez Flores, afirmó que la producción de libros de texto para la Secretaría de Educación Pública se redujo 25 por ciento, y la de libros al público en general 4 por ciento.
“En 2019 la industria editorial privada vendió 123 millones de ejemplares y facturó 11 mil 234 millones de pesos por venta de libros, lo cual representa una disminución de 7 por ciento respecto al núme-ro de ejemplares, pero 6 por ciento más en facturación, pues el precio promedio pasó de 79 pesos por ejemplar a 91 pesos”, sostu-vo Ramírez.
Añadió que los libros de texto gratuitos de secundaria son 29 millones de ejemplares y los de educación básica suman 18.9 millones, lo que representa el grueso de la comercialización, pero apenas aportan 11 por ciento de la facturación neta al ser libros que se venden a precios muy inferiores.
Según el informe presentado por la Caniem, los libros más vendidos son infantiles y juveniles con 20.3 millones, lo que genera mil 242 millones de pesos.
Siguen los libros religiosos, con 10.9 millones de ejemplares en 2019, después literatura y ficción con 10.7 millones, seguidos de los de salud y desarrollo personal, con 3.9 millones.
En ese panorama, el presidente de la Caniem consideró que una de las estrategias para recuperar algo en este 2020 en cuanto a ventas es, en conjunto con la Asociación de Libreros de México, juntarse en la FIL con ventas especiales en todas las librerías del país, además de las estrategias propias de las editoriales.
Arzoz agregó que esperan una pronta respuesta a la solicitud por escrito que hicieron al gobierno federal para solicitar apoyos y con observaciones para la iniciativa de la Ley del Libro que se discute en la Cámara de Diputados.
