Rusia podrá vacunar contra el COVID-19 a entre el 70 y 80 por ciento de su población en un plazo de 9 a 12 meses, afirmó este martes Alexandr Ginzburg, d
Director del Centro Gamaleya, creador de la primera vacuna rusa anticoronavirus, denominada Sputnik V.
“Las empresas que se encuentran en el territorio del Centro Gamaleya trabajan en tres turnos, pero no pueden producir ni de cerca los volúmenes necesarios para vacunar a la mayor parte de la población de nuestro país”, indicó Ginzburg.
Por ello, explicó, se transfieren las tecnologías a tres o cuatro empresas en condiciones de producir la vacuna.
Según el especialista, con ese porcentaje de vacunación se pondrá fin a la circulación de nuevo coronavirus entre la población.
Ginszburg indicó que los estudios clínicos posteriores al registro de la vacuna se desarrollan con éxito.
“Ya a unos de dos mil 500 moscovitas se le inoculó el primer componente de la vacuna, y no presentan ninguna complicación”, subrayó.
Por otra parte, el Ministerio de Sanidad de Rusia autorizó hoy las pruebas clínicas de la tercera vacuna nacional contra el COVID-19, creada por el Centro Chumákov de preparados inmuno-biológicos.
Más de tres mil voluntarios participarán en los ensayos clínicos, que se efectuarán en la ciudades de San Petersburgo, Kírov y Novosibirsk, según un comunicado.
Los voluntarios serán aislados durante de 16 días bajo observación médica.
A día de hoy las autoridades rusas han registrado una sola vacuna contra el COVID-19, la creada por el Centro Gamaleya.
Mánturov aclaró que los acuerdos alcanzados con un treintena de países para el suministro de la vacuna rusa se refieren en particular “a la organización en el extranjero de su producción conjunta en empresas ya existentes”.
Rusia, con un millón 115 mil 816 casos de COVID-19, ocupa el cuarto lugar en el mundo, detrás de Estados Unidos, India y Brasil, por número de contagios, pero la letalidad de la enfermedad es inferior a la de muchos países, ya que se han registrado 19 mil 649 fallecimientos.
En los últimos días, los contagios han repuntado en el país, con más de seis mil nuevos casos diarios, pero las autoridades aseguran que la situación epidémica está controlada y que el sistema sanitario ruso está preparado para hacer frente a un aumento de positivos mucho mayor.