El presidente Andrés Manuel López Obrador aseveró que la caída de la economía mexicana fue del 10.4 por ciento derivada de la crisis por el COVID-19.
En su Segundo Informe de Gobierno, López Obrador dejó en claro que lo peor de la crisis económica ya pasó para México.
El mandatario mexicano apuntó que las remesas han crecido un 10 por ciento en relación al año pasado y estimó que llegarán a final de año a un total de 40 mil millones de dólares, en beneficio de 10 millones de familia
López Obrador subrayó que la pandemia “no ha desembocado en hambruna ni en escasez de alimentos, ni en asaltos, y el pueblo de México tiene recursos para su consumo básico”.
Recalcó que el consumo de productos básicos aumento en 9.5 por ciento en términos reales con relación al año pasado, la recaudación de impuestos e mantuvo prácticamente igual que en el 2019, y la inversión extranjera directa durante el primer semestre llegó a 17 mil 969 millones de dólares.
Con respecto a la relación con los empresarios indicó que ha sido “respetuosa”, y enfatizó que no han despedido trabajadores, aumentaron el salario de los trabajadores en 20 por ciento en lo que va del año y aceptaron incrementar su cuota al sistema de pensiones.