La agencia calificadora HR Ratings comentó que en abril México presentó un fuerte déficit comercial derivado del desplome en las exportaciones, principalmente en la rama automotriz, así como la reducción en el déficit petrolero.
En el cuarto mes de este año, el balance comercial de mercancías fue fuertemente deficitario como consecuencia de las medidas de distanciamiento y paro de labores derivado de la pandemia de COVID-19, un hecho que afectó tanto a México como Estados Unidos.
La calificadora señaló que el impacto fue “muy severo” en las exportaciones manufactureras, particularmente en el sector automotriz, lo cual muestra su correspondiente alto nivel de valor agregado nacional. En contraste, y a pesar de la caída en los precios del petróleo, el déficit petrolero mostró una disminución.
Este hecho señala que México ya es un importador neto, en términos de valor, de hidrocarburos y, por ende, una caída en sus precios no representa el impacto negativo en el balance comercial que hubiera mostrado hace menos de 10 años.
Por otra parte, la debilidad en el mercado mexicano se reflejó en la caída en las importaciones de bienes de consumo y de capital, mitigando parcialmente el efecto negativo del desplome en las exportaciones manufactureras.
HR Ratings consideró que es importante tomar en cuenta el fuerte incremento en el ahorro personal de los estadounidenses, hecho que podría resultar en un repunte en la demanda proveniente de su economía.