Exhorta OMM a la acción climática en el Día de la Tierra

El cambio climático se ha acelerado en la última década y se espera que en el próximo lustro se produzca de nuevo un récord de temperatura promedio mundial, informó hoy la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

Al celebrarse este miércoles el Día de la Tierra, la concentración de dióxido de carbono (CO2) es aproximadamente un 26 por ciento mayor al de 1970, mientras que la temperatura subió 0.86 grados Celsuis (°C ) desde entonces, y es 1.1 °C más elevada que en la era preindustrial.

“Hace 50 años se celebró el primer Día de la Tierra, y desde entonces las señales físicas del cambio climático y sus consecuencias para nuestro planeta han cobrado impulso, hasta alcanzar su punto álgido en los últimos cinco años”, estimó.

Refirió que para el próximo quinquenio (2020–2024) podrían producirse un nuevo récord de temperatura media mundial, según las predicciones climáticas obtenidas a partir de datos recopilados por el Centro Principal de la OMM de Coordinación de la Predicción Climática Anual a Decenal, administrado por el Centro Hadley de la Oficina Meteorológica del Reino Unido.

Las regiones de latitudes altas y zonas terrestres sufrirán ese aumento de la temperatura, mientras que el calentamiento en océano será más lento, en especial en el Atlántico Norte y en el austral.

Además, la pandemia del coronavirus (COVID-19) puede “conllevar una reducción transitoria de las emisiones de gases de efecto invernadero, pero no sustituye una acción climática “.

“Si bien la COVID-19 ha provocado una grave crisis económica y sanitaria de alcance internacional, el hecho de no hacer frente al cambio climático puede poner en jaque el bienestar de las personas, los ecosistemas y las economías durante siglos”, afirmó el secretario general de la OMM, Petteri Taalas.

“Tenemos que aplanar la curva tanto de la pandemia como del cambio climático. Debemos mostrar la misma determinación y unidad contra el cambio climático que contra la COVID-19. Tenemos que actuar juntos en interés de la salud y la prosperidad de la humanidad, no solo durante las próximas semanas y meses, sino pensando en muchas generaciones futuras”, puntualizó.

El directivo aseguró que “los fenómenos meteorológicos extremos han aumentado, y no desaparecerán a causa del coronavirus. Al contrario, la pandemia no hace más que dificultar el reto que conlleva la evacuación de las personas para protegerlas de ciclones tropicales”.

Agregó que también se corre el riesgo de que los sistemas de salud saturados no enfrenten a una carga adicional de pacientes debida, por ejemplo, a olas de calor.

“Las poblaciones vulnerables de aquellos países cuyos sistemas de preparación para casos de desastre son más precarios deben encarar los mayores riesgos. Los gobiernos deben redoblar sus esfuerzos para fortalecer los sistemas de alerta y así poder afrontar múltiples riesgos”, puntualizó Taalas.

Por otro lado, la OMM destacó que los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales (SMHN) siguen prestando sus servicios esenciales, y han desempeñado una función clave en el registro de contaminantes más importantes como de la mejora de la calidad del aire, fruto de la caída de la actividad industrial.