Las autoridades sanitarias de Corea del Sur reportaron este viernes 52 nuevos casos de coronavirus, con lo que el número total de infectados se elevó a 156, mientras alertaron que la enfermedad potencialmente mortal se ha comenzado a propagar rápidamente a lo largo del país.
La cifra de infectados se disparó esta semana, luego que el total de casos llegó a más de 100 en solo tres días, debido principalmente a un brote del coronavirus en una iglesia ubicada en la ciudad de Daegu, a unos 300 kilómetros al sureste de Seúl, la capital del país.
De acuerdo con el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Corea del Sur (KCDC, según sus siglas en inglés), de los 52 casos nuevos, 41 se registraron en Daegu y en la provincia circundante de Gyeongsang del Norte. Otros tres se reportaron en Seúl, informó la agencia surcoreana Yonhap.
Las autoridades sanitarias de Corea del Sur declararon que el COVID-19 ha comenzado a propagarse rápidamente en el país tras la subida drástica de infecciones en Daegu y los casos en Seúl.
El KCDC dijo que dos de los nuevos casos fueron reportados en la provincia de Gyeongsang del Sur. Como señal de que el virus podría estar propagándose a nivel nacional, seis provincias, incluyendo Gyeonggi, Chungcheong y Jeolla del Norte, reportaron un caso cada una.
De los 52 casos nuevos, 39 están vinculados con la unidad de Daegu de la Iglesia de Jesús Shincheonji, el Templo del Tabernáculo del Testimonio, a la que asistió la paciente número 31, potencialmente el «superesparcidor» del país, según el KCDC.
La mujer surcoreana de 61 años, que dio positivo en la prueba del virus previamente en la semana, asistió a unos servicios religiosos en la iglesia, el 9 de febrero y el domingo de la semana pasada.
El Gobierno de Seúl decidió designar a Daegu y la comarca vecina de Cheongdo como «zonas de control especial», tras el aumento en el número de contagios y la primera muerte de un infectado por el virus en el país.