La secretaria de Salud capitalina, Olivia López Arellano, destacó que México no tiene ningún caso confirmado de coronavirus, ahora COVID-19, y la capital del país sólo ha registrado cuatro sospechosos, pero subrayó la importancia de seguir las medidas de prevención.
En entrevista luego de participar en una mesa de trabajo con integrantes de la Comisión de Salud del Congreso de la Ciudad de México, sostuvo que de cuatro casos sospechosos en la capital sólo uno continúa en observación.
Subrayó sin embargo que se deben seguir las medidas de prevención, que son muy importantes y sencillas, para evitar infecciones respiratorias como influenza, que es la que provoca más casos y el catarro común.
Aunque mencionó que no es tan contagioso ni presentará problemas como puede ser el sarampión, apuntó que es importante tomar medidas de higiene y que la población sepa que se cuenta con los protocolos para atender este asunto.
En la mesa de trabajo, encabezada por la presidenta de la Comisión de Salud, Lourdes Paz Reyes, también sostuvo que «en la Ciudad de México se han tenido cuatro casos sospechosos de coronavirus o COVID-19 y se han descartado tres. Esperamos que hoy (miércoles) en la noche se descarte el último».
Al abordar el tema los legisladores Tonatiuh González, Jorge Gaviño, Carlos Hernández, Lizette Clavel y Yuriri Ayala se pronunciaron por fortalecer los protocolos de detección en puertos, aeropuertos y fronteras para evitar la propagación.
También por emitir información objetiva a la población, así como las acciones preventivas de contagio, y conocer si los médicos ya están capacitados o están recibiendo capacitación.
De acuerdo con el formato, la secretaria López Arellano ofreció un informe y explicó los avances de la dependencia a su cargo durante 2019. «Es importante señalar que son acciones sin el financiamiento del Insabi, todo se realizó con recursos de la Ciudad de México».
Aseguró que el abasto de medicamentos pasó de 30 a 80 por ciento y en «enero disminuyó y estamos en 75 por ciento; se eliminó la subrogación, lo que trajo un ahorro de 200 millones de pesos».
Sobre el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) añadió que «nuestra postura en favor de este modelo deriva de que con el Seguro Popular cada afiliado era un signo de pesos. Se otorgaba un paquete restringido de intervenciones médicas y se condicionaba el financiamiento a la afiliación de las personas».
«Es decir, era una visión acortada del derecho a la salud, ello reproducía desigualdad estructural. Con el Insabi se busca garantizar el derecho a la salud para todas las personas. Lo que debemos cuidar es no quedarnos cortos de recursos y garantizar este derecho».
Advirtió que no se parte de cero, «tenemos un modelo de gratuidad de servicio y medicamentos, por ello el vínculo con el Insabi revitalizará la perspectiva de gratuidad. Sabemos que hay preocupación por los convenios, les informo que lo estamos revisando. Es probable que en esta semana quede listo».
Informó que los recursos otorgados por el Insabi para el modelo de salud de la capital ascienden a tres mil 200 millones y nueve mil millones de pesos son recursos de la ciudad, por ello el nivel de autonomía debe ser mayor.